lunes, 29 de marzo de 2021

La cocina musulmana de Occidente. Juan Antonio Molina

Soy un apasionado de la gastronomía, por lo que La cocina musulmana de Occidente (Ediciones Alfar), de Juan Antonio Molina, me ha parecido un libro doblemente interesante. El escritor y periodista sevillano, autor de obras como Breve historia de la gastronomía andaluza o La cocina sevillana, nos agasaja con un magnífico libro subtitulado Historia de la gastronomía arábigoandaluza

  Molina marida bien la parte histórica, salpimentada con textos de autores islamitas, con la parte culinaria. Descubrimos así la aportación de los musulmanes llegados a la Península Ibérica en el siglo VIII en los fogones y más allá. Aunque es cierto que destaca esa gastronomía arabigoandaluza imaginativa y rica en sabores y matices como lo sigue siendo muchos siglos después de la Reconquista. Molina nos traslada a una casa de la época, a sus estancias, a un zoco o a una reunión familiar además de referirse a cómo eran la ganadería, la agricultura o la pesca, por poner unos ejemplos. 

  El territorio andalusí ya era rico en materias primas, pero con la llegada de los musulmanes y su acerbo cultural se enriqueció aún más. La fama de las artes de pesca analusíes, no solo las almadrabas para la pesca del atún, obviamente, llegó al Siglo de Oro al punto de ser mencionadas, por ejemplo, en la novela La ilustre fregona una de las Novelas ejemplares de Miguel de Cervantes.

  Si hablamos del reino vegetal, las leguminosas o las berenjenas, junto con el aceite de oliva, tienen un protagonismo indiscutible en la gastronomía arabigoandaluza. De este modo, Molina añade un apartado casi imprescindible en este La cocina musulmana de Occidente. Me estoy refiriendo al apartado del Recetario andalusí. 

  En este recetario de más de cuarenta recetas nos invita a ponernos el delantal con carnes, pescados, legumbres o verduras. Recetas con cordero, con berenjenas, con pollo o con lentejas no desmerecen la inclusión de otras tan representativas como el cuscús, el mechuí, la alboronía (mencionada en Las mil y una noches) o  la semolina con pollo, uno de los platos más antiguos de la cocina arabigoandaluza.

Solo me resta invitaros a leer este La cocina musulmana de Occidente para que lo disfrutéis desde los ojos al estómago. 

Buen provecho. 

 La cocina musulmana de Occidente. Juan Antonio Molina. Ediciones Alfar.

lunes, 22 de marzo de 2021

La vida secreta de las películas. Simon Brew.

Leer ciertos libros, en ocasiones, te hace ver las cosas de otra manera. Ocurre, por ejemplo, con La vida secreta de las películas (Anaya), de Simon Brew

  El conocido crítico de cine británico que crease en 2007 la famosa web de cultura alternativa Den of Greek nos regala una sesión maratoniana de detalles, pistas, cameos y secretos sobre el cine. 

  Quizá no sea como descubrir quiénes son en realidad los reyes magos o que la Tierra no es una esfera perfecta. Pero os aseguro que leer las páginas de La vida secreta de las películas os hará reflexionar sobre las películas y el fascinante séptimo arte. 

 Las grandes películas, como en las grandes familias, tienen sus secretillos ocultos, sus guiños, sus bromas internas. Gracias a este libro descubrimos ese incómodo bigote de Superman, la causa verdadera de esa sangre ausente en Jurasic Park o cómo una mítica película de 1979 hizo aumentar las ventas exponencialmente de una pieza de música clásica de 1928… 

  Cuántas veces hemos tenido que aguantar al ‘cuñado/a’ de turno señalándonos las costuras de nuestras películas favoritas y hemos tenido que contar hasta diez. Pues ahora es el turno de abrir La vida secreta de las películas y descubrir por nosotros mismos esos motivos ocultos, esos cameos de escritores o directores, esos retoques en postproducción. Clásicos como ¡Qué bello es vivir!, El acorazado Potemkin o Solo ante el peligro; de animación como Bambi, Gru: mi villano favorito o Aladdín; junto a otras tan curiosas como Serpientes en el avión, Annie, Dogma o Mimic

  Coge tu cucurucho de palomitas, busca un sofá cómodo y ponte a disfrutar sin necesidad de gafas de colorines de La vida secreta de las películas. Prólogo de Kim Newman.


La vida secreta de las películas. Simon Brew. Ediciones Anaya. Trad.: Gemma Deza Guil.

miércoles, 17 de marzo de 2021

Todos buscan a Nora Roy. Entrevista a Lorena Franco

Hoy comparto con vosotros la entrevista que me ha concedido recientemente Lorena Franco, autora de “Todos buscan a Nora Roy” (Planeta). Un nuevo trepidante thriller tras el éxito de su anterior “El último verano de Silvia Blanch” (Planeta) que disfruté página a página. Confío en que también os animéis a leer esta novela de Lorena Franco además de la entrevista.

  Ginés Vera: Creo que es la primera novela que leo en la que el oficio de la protagonista es la tanatopraxia. Qué original. Como también esos detalles sobre los espasmos y los silbidos a causa de los gases durante la labor de Eva en este oficio. “Este trabajo da para muchas anécdotas -leemos-, pero casi nadie las quiere escuchar.” ¿Cómo y cuándo decidió este rasgo para este personaje? ¿Tuvo ocasión de “documentarse” sobre la labor del tanatopractor/a? 

  Lorena Franco: La tanatopraxia es una profesión que siempre me ha atraído, aunque reconozco que yo sería incapaz de ejercerla. Que a Eva no le traume la idea de enfrentarse a cadáveres también ayuda en una trama que, a medida que avanza, se vuelve más truculenta. Estamos acostumbrados a inspectores, periodistas… por lo que aporta un toque original en el género del thriller y siempre quise introducir esta profesión en alguna de mis historias; en esta encajó perfectamente. Sí me documenté mucho sobre la tanatopraxia, algo que hizo que admirara aún más la labor que ejercen, pero la perspectiva de Eva, en la mayor parte de la historia, no se centra en el sentido práctico de su trabajo, sino que lo abordamos más desde una perspectiva humana y sensible. 

  G.V.: En uno de los pasajes de la novela, Eva habla del morbo periodístico de algunos medios de comunicación que alargan las noticias para despertar el interés del público. No sé si es de alguna manera una crítica velada al cuarto poder, quizá ese elemento de denuncia social habitual en el género de la novela negra más allá de la parte ficcional de la historia.

  L.F.: Desde la parte ficcional de la historia, Eva sabe la verdad, una verdad que los medios encubren o no han descubierto aún, por lo que eso le genera una frustración que la lleva a hacer esta crítica. Cuando una noticia se convierte en un tema popular del que la gente quiere saber, se alarga hasta límites que, en ocasiones, no tienen mucho sentido e incluso a veces pierden cierta credibilidad. Ocurre en el caso de Nora Roy y ocurre en realidad, aunque no es un tema que haya metido en la historia como denuncia social. Hay temas mucho más graves como la corrupción, el abuso de poder… 

  G.V.: Uno de los personajes afines a la protagonista es tajante con una de sus frases: “Porque el mundo está loco.” Esa locura social, metafórica acaso, ese sentimiento de que como sociedad tendemos al caos o a la irracional ¿puede ser uno de los elementos clave de “Todos buscan a Nora Roy”?

  L.F.: Desde luego. Porque muchas de las cosas que ocurren en “Todos buscan a Nora Roy” son de locura, de una maldad sin límites. Pero, como se suele decir, la realidad supera a la ficción. Muchos lectores han recordado a través de esta trama un caso muy conocido en España que no mentaremos para no hacer spoiler, pero la propia Eva también lo menciona. ¿Quién no ha dicho, como Lola, compañera de trabajo de Eva en el Tanatorio, que el mundo está loco tras ver según qué noticia en los informativos? Yo lo he dicho muchas veces, seguro que tú también. 

 G.V.: Eva evoca a menudo a su abuela. A los consejos o a los últimos años que pasó con ella. Creo que ese personaje, su relación con Eva, tiene un papel importante en la trama de la novela. ¿Qué nos puede contar a este respecto?

  L.F.: La abuela de Eva es una sombra. Siempre está en su recuerdo, es el principal motivo por el que se refugia en la ficción, en no querer saber demasiado de lo que ocurre en “el mundo real”. Su abuela fue como una madre y un padre al mismo tiempo; “nana”, como la llamaba, fue su persona favorita en el mundo y ahora que le falta, es normal que no termine de habituarse a su nueva vida sin ella. 

  G.V.: “...Hay gente mala y ya está. Demonios, son demonios disfrazados de personas normales y corrientes.” Curiosa  la reflexión de uno de los personajes cercanos a Eva. Háblenos de estos “demonios”, de si también coincide con el personaje de su existencia entre nosotros.

  L.F.: Sí, es la reflexión de la señora Cecilia, la vecina del segundo, una anciana de noventa años que tiene por costumbre asustar y sobrecoger a Eva y que, en un principio, no iba a tener mucho protagonismo en la historia, pero que al final es el desencadenante de muchas cosas… Y sí, coincido con ella en esos “demonios” que pasan desapercibidos entre la sociedad; solo hace falta encender la tele, ver los informativos o leer la prensa, y conocer su existencia. 

Sigue leyendo la entrevista aquí.

Reseña de “El último verano de Silvia Blanch”

Todos buscan a Nora Roy. Lorena Franco. Ed. Planeta.

viernes, 12 de marzo de 2021

A fuego lento. Maria Amor y Javier Martín

El libro que traigo aquí hoy, A fuego lento (Almuzara), de María Amor Martín y Javier Martín, me ha llegado muy dentro por dos caminos. El literario y el gastronómico. 

  Me siento a la mesa, me coloco la servilleta y os comento. A fuego lento es un libro de relatos, eso de aperitivo, es una antología de historias a cuatro manos, las de María Amor y Javier Martín. Historias divertidas, reflexivas, hilarantes y, sobre todo, vertiginosas. Algo así a irse de pintxos o de tapeo. 

 Personajes como una ministra de Hacienda, un presidente de Gobierno, la cocinera de ese mismo cargo comparten mesa metafórica en estas páginas con un chapuzas, un librero, una madre o una adivina por poner algunos ejemplos. Todas y todos tienen algo en común, eso que vertebra este A fuego lento, eso que me ha ganado también en lo extraliterario. Lo gastronómico. 

  Se olía ya, sin duda, como el guiso de una madre conforme nos acercamos a la cocina. Y es que en A fuego lento sus autores se valen de recetas tradicionales, modernas unas, más clásicas otras, mediterráneas, americanas, asiáticas; ya entrantes ya primeros platos ya postres, para maridar estas historias con un plato, su preparación y un vino singular. Cada receta genera así una historia aderezada con sus ingredientes, como si esas migas, esa merluza con muselina de ajo, ese gazpacho manchego o esas rosquillas de anís fueran un personaje más en cada relato. 

  A fuego lento se lee, se disfruta con la vista, pero ay, que también notaremos el estómago agradecido si nos dejamos llevar por estas sesenta y seis recetas y los vinos que las acompañan -con la ficha de cata al final del libro. 

  Os animo a leer, a disfrutar y a colocaros el delantal de cocina con este A fuego lento, seguro que no os faltarán amigas y amigos si organizáis un club de lectura o un club gastronómico con este libro sobre la mesa. A vuestra salud.


A fuego lento. María Amor y Javier Martín. Almuzara.

martes, 9 de marzo de 2021

Cocina vegana en 15 minutos. Kay Beskow

Cocina vegana en 15 minutos (Cúpula), de Kay Beskow, es un libro para quienes como el que suscribe no queremos pasarnos mucho tiempo en la cocina. Al menos, entre semana. 

  Si además de rápidas, y las cien recetas de este libro lo son, el resultado es colorido, sabroso y original este Cocina vegana en 15 minutos os llegará a la patata –perdón por el juego de palabras– en menos de esos aludidos 15 minutos... 

  Porque en este libro su autora ha querido ir directa a esas recetas fáciles, sin complicaciones, maridadas con algunos consejos prácticos a la hora de elaborarlos o sobre la parte saludable. Dividido en desayunos, aperitivos ligeros, patos principales, dulces y un apartado llamado “Los básicos”,  Beskow nos anima ya en la introducción a preparar platos suculentos para nosotros o para la familia sin necesidad de invertir mucho tiempo y con un resultado delicioso y equilibrado. 

  Y entrando en harina –nuevo juego de palabras–, os tengo que hablar, tanto si sois o no veganos, por ejemplo de los desayunos dulces o salados de este Cocina vegana en 15 minutos. De ese zumo de zanahoria y jengibre o del energético batido de mantequilla de cacahuete y plátano. Entre los aperitivos, no me olvido del gazpacho de pimiento rojo o de los buñuelos de guisantes y hierbabuena, salvo para mencionar las ensaladas o la deliciosa sopa roja de coco. En los principales la fiesta de los sabores se reparte entre las recetas más mediterráneas, como por ejemplo las de pasta; las asiáticas, con ese yasai miso ramen o el pad thai jay con lima y sésamo, o las americanas, con ese chile con carne y canela o las quesadillas de alubias negras. Y llegamos a los postres. 

  Un postre en 15 minutos es un doble regalo, las y los asiduos a la cocina lo sabéis. Solo leyendo estos nombres se nos hará la boca agua: helado de banana split, dulce de lima y coco, crumble de frambuesa, rosa y pistacho o bizcocho perezoso con caramelo y chocolate

  Que no se me olvide hablar de esos básicos entre los que hallaremos un guacamole, un hummus de cebolla roja caramelizada o un pesto de limón y almendras. Poco que añadir, creo que en el tiempo en el que se lee esta receta podéis preparar, seguro, una de las cien magníficas recetas de este Cocina vegana en 15 minutos… ¿A qué esperáis?


Cocina vegana en 15 minutos. Kay Beskow. Libros Cúpula. Trad. Elisabet Bruna Güell.

jueves, 4 de marzo de 2021

La trucha que mató al rey. Teresa López Velayos

¿Habéis jugado alguna vez al juego de la oca? Yo recuerdo con nitidez cuando entró en mi casa, el día que mi madre compró el juego. 

 Nostalgias aparte, una imagen de ese popular juego de mesa forma parte de la portada de La trucha que mató al rey (Torre de Lis), de Teresa López Velayos. A su protagonista también le regalan un juego de la oca y con él va poder comunicarse con un curioso personaje. 

  La historia de La trucha que mató al rey nos la cuenta Petra, una colegial de 12 años que vive en un pequeña localidad castellana en 1968. Según una leyenda local, en ese pueblo murió el hermano pequeño de Isabel la Católica. 

 Para las y los más curiosos, en el municipio de Cardeñosa (Ávila) fue envenenado el rey Niño, Alfonso de Castilla, y donde transcurrió la infancia de Teresa López Velayos

 Petra y sus amigas querrán averiguar qué hay de real en esa leyenda embarcándose en una fascinante aventura de la mano de un espíritu del pasado que vivió en el siglo XV. 

  La trucha que mató al rey me ha sorprendido gratamente por la narración y por la ágil lectura que plantea su autora. Salvando las distancias, me ha evocado un poco a Matilda, de Roald Dahl, incluso a las novelas de Los Cinco, a las que López Velayos alude en esta novela. 

  Petra y sus amigas no solo vivirán una aventura al estilo de Los Cinco, también nos transportará a nuestra niñez  al leer menciones a Perry Mason, a la perra Lassie, al pan con Nocilla, a los TBO, al Exin Castillos o al año que Massiel ganó el Festival de Eurovisión

 Y como en el juego de la oca, voy de nuevo al principio, al tablero de la portada, para comentar que en la contraportada, además de la sinopsis, vemos la imagen de un pozo, de uno del mencionado juego. Será un elemento clave en esa insólita búsqueda de Petra y sus amigas, junto a una cueva mágica, para descubrir si la leyenda del joven rey envenenado en 1468 en la posada de su pueblo es cierta o no.  

  La trucha que mató al rey nos devuelve la magia de los libros, de las buenas historias para jóvenes y adultos de la mano de Teresa López Velayos,  nominada a los Premios Goya como guionista y coproductora del corto documental En un lugar del cine (2010) y por el corto de ficción El paraguas de colores (2014).


Teresa López Velayos es licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Su trayectoria profesional la ha vinculado al mundo de la radio treinta años como redactora, locutora, presentadora, guionista y productora de diversos programas, en especial los dedicados a la cultura y el cine. Autora de libros biográficos como Kenneth Branagh. En el nombre de Shakespeare (1997); de gran formato: Rodajes al borde de un ataque de nervios. El cine español se confiesa (2007); relatos de ficción: Entre Sueños. Historias de otro lugar (2016); y cuentos infantiles: El olivo mágico de Hualdo (2015). En 2018 coescribió El papel de mi vida y su primera pieza teatral La exposición, relacionada con el Arte y el Museo del Prado. 

La trucha que mató al rey. Teresa López Velayos. Torre de Lis.

lunes, 1 de marzo de 2021

El umbral de la mentira. Elly Griffiths

El umbral de la mentira (Maeva), de Elly Griffiths, me llamó la atención desde la portada. La protagonista es una arqueóloga forense, Ruth Galloway, que deberá resolver un asesinato del pasado. 

   Pero el pasado tiene reservadas sorpresas como un puzle a la espera de ser resuelto en el presente si saben leerse correctamente las pistas. Es indudable que  Griffiths ha sabido aprovechar el éxito de crítica y público de su anterior novela, Los ecos del pantano (Maeva), para dotar de fuerza interpretativa a la protagonista en esta segunda entrega. Si en aquella los hallazgos fueron en la zona pantanosa del condado de Norfolk, en esta serán en una mansión victoriana. 

  Un primer esqueleto durante las obras de demolición dará paso a otros en lo que inicialmente hará pensar en restos romanos y, más tarde, en ritos paganos celtas. Nuevos hallazgos y una narración en contrapunto con un diario de un misterioso personaje nos sumergirán de lleno en una vertiginosa trama de crímenes por resolver. Como buena novela del género, El umbral de la mentira también incluye guiños a conflictos sociales, especialmente relevante es el conflicto personal de la protagonista al saberse embarazada. 

   No es casual que el esqueleto hallado sea el de un prepúber, como tampoco que entre los temas de esta novela hallemos la soledad, la transformación, la maternidad o lo sagrado en los personajes o en los distintos escenarios. La zona liminar a modo de puente entre la vida y la muerte es una metáfora y uno de los ejes narrativos; también la parte ritual, pagana, de ciertas culturas del pasado y su influencia en nuestras creencias presentes. 

   El umbral de la mentira es una novela que abre sus páginas como una puerta al misterio, a la arqueología forense y a la condición humana cuando pone en tela de juicio sus creencias y su fe en lo conocido y lo desconocido.


El umbral de la mentira. Elly Griffiths. Maeva Traducción: Jofre Homedes Beutnegel