Páginas

lunes, 28 de septiembre de 2020

Cuentos. Thomas Wolfe

La portada de este Cuentos (Páginas de espuma), de Thomas Wolfe, muestra una fotografía del autor en Oregon, en 1938. Wolfe observa el Monte Hood. También nosotros, como lectorxs, le observamos en esa acción de mirar, de contemplar, casi adivinando su fascinación por el paisaje, por la majestuosidad de la naturaleza salvaje. 

Wolfe no solo escribió relatos, también firmó obras teatrales y novelas como El ángel que nos mira (1929), cuyo éxito inmediato le permitió dedicarse en exclusiva a la literatura o Del tiempo y del río (1935). En Cuentos, estos casi sesenta relatos reunidos y traducidos por Amelia Pérez de Villar ordenados cronológicamente servirán a las y los lectores como referente de la narrativa del gran escritor norteamericano de principios del s. XX. 

Porque Wolfe escribió relatos de su infancia y de su juventud añorada, como también de sus viajes e impresiones. Quizá por ello sumergirse en esta lectura se nos antojará como viajar en el tiempo a la América salvaje, ruda, una veces agreste y otras rural o civilizada aquejada del mal del progreso. También hay relatos de sus experiencias en Europa, todo y que América y las transformaciones que sufrió el país entre las dos grandes guerras son el hilo conductor de estas historias. 

Hay un marcado impresionismo, unas descripciones vivas, morosas, con personajes cercanos, integrados en los dramas y conflictos de esos momentos vividos por el escritor. El ferrocarril, el Oeste americano, la naturaleza inmisericorde o la discriminación racial también asoman con fuerza en las narraciones de extensión variable. Sirva el detalle de se le impidió la entrada en Alemania por sus relatos sobre este país. Su prosa casi barroca, llena de matices nos habla en Cuentos de la familia, de la ciudad o del campo y los bosques aunándose para conformar un corpus de descubrimiento, de fascinación si se quiere por un autor, el personalísimo Wolfe fallecido prematuramente a los treinta y siete años. 

Este Cuentos, de Thomas Wolfe, es una de las más exhaustivas traducciones al español de la narrativa breve del autor y un extraordinario fresco de la cultura estadounidense de su época. 

Thomas Wolfe (Asheville, Carolina del Norte. 1900) fue profesor de inglés en la Universidad de Nueva York, entre 1924 y 1930. Su primera novela, El ángel que nos mira (1929), tuvo un éxito inmediato. La siguieron Del tiempo y del río, (1935) y No se vuelve a casa (1940). Su escritura se caracteriza por su lirismo y se le ha comparado en ocasiones con el poeta estadounidense Walt Whitman. Destaca también la colección de relatos De la muerte a la mañana (1935), Historia de una novela (1936), Las montañas de más allá (1941), Diario occidental (1951) y Escribir y morir (1964). 

Cuentos. Thomas Wolfe. Páginas de espuma.

3 comentarios:

  1. No he leído nada del autor. Y por lo que cuentas, creo que estos relatos son ideales para estrenarme.
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Margari, anímate y nos cuentas. Un saludo.

      Eliminar
  2. Con lo que me gustan a mí los relatos.. Y qué bien lo hacen los de Páginas de Espuma. Tomo nota Ginés. Saludos.

    ResponderEliminar