Páginas

viernes, 22 de octubre de 2021

A sangre y fuego. Manuel Chaves Nogales

Qué feliz descubrimiento literario ha sido leer “A sangre y fuego” (Libros del Asteriode), de Manuel Chaves Nogales. El libro me llegó como regalo de un amigo que me sugirió que lo leyera. Quizás él, mi amigo –también escritor, podéis leer la entrevista que me concedió al pie de esta reseña*–, sí sabía de mi afición por la narrativa breve. Quizá no de mi hartazgo de la literatura sobre la Guerra Civil Española. De ahí la doble alegría. 

  Son nueve los relatos –como también nueve son los que recogió otro gran cuentista, J. D. Salinguer… aunque ahí acaban las coincidencias– que componen “A sangre y fuego”. Dos de ellos inéditos, acompañados para esta edición por una excelente introducción de María Isabel Cintas.  Fueron escritos entre 1936 y 1937. Este año fueron publicados en Chile, inicialmente en varias revistas internacionales. 

  Si uno se para a leer el subtítulo del libro, “Héroes, bestias y mártires de España” puede hacerse quizá una idea de los personajes que van a aparecer en las páginas de estas historias. Y pensará así que se acercarán a la ficción, pero nos advierte una nota inicial que «cada uno de sus episodios ha sido extraído fielmente de un hecho verídico; cada uno de sus héroes tiene una existencia real y una personalidad auténtica.» Tenemos así en “A sangre y fuego” una colección nueve historias rayanas en lo testimonial acerca de lo ocurrido en la guerra civil. Chaves denuncia así las atrocidades cometidas por ambos bandos, de ahí el subtítulo. En el primero titulado “¡Masacre, masacre!” nos sitúa en Madrid, donde, como primeras imágenes, un avión deja caer como una pompa de jabón su letal cargamento sobre la población civil... 

  Su prosa conmueve, impresiona e invita a la reflexión incluso habiendo transcurrido tres cuartos de siglo desde el final de la contienda. En “El tesoro de Briesca”, por ejemplo, desde un humilde pueblo manchego nos asomamos a lo que supuso el expolio y saqueo de obras de arte a pesar de la determinación de sus vecinos: “Los tesoros eran del pueblo y seguirían la suerte del pueblo”. Si nos sumergimos en el relato “Los guerreros marroquíes”  descubriremos la triste suerte de Mohamed en la sierra de Gredos, aunque también el asalto de los sublevados a Madrid con el apoyo de facciones de musulmanes “esclavos de la disciplina guerrera.”   

  Los dos últimos relatos de “A sangre y fuego” nos emplazan a Bilbao. Si conmovedora es la historia de “El refugio”, qué interesante guiño hace el autor en “Hospital de sangre.” El valor de una vida parece medirse de manera bien distinta en tiempos de paz y de guerra. Curiosamente, la última palabra del último de los relatos es Valencia. Y digo curiosamente porque fue en Valencia donde la sangrienta Guerra Civil Española puso el punto final a tres años de barbarie. 

Quedarán heridas, pero puestos a quedarme, prefiero la lectura lúcida y vibrante de Manuel Chaves Nogales en “A sangre y fuego


Manuel Chaves Nogales (Sevilla, 1897– Londres, 1944). Se inició muy joven en el periodismo, primero en Sevilla y más tarde en Madrid. Entre 1927 y 1937, Chaves Nogales alcanzó su cénit profesional escribiendo reportajes para los principales periódicos de la época y ejerciendo, desde 1931, como director de Ahora, diario afín a Manuel Azaña. Al estallar la guerra civil se puso al servicio de la República y siguió trabajando como periodista hasta que el gobierno abandonó definitivamente Madrid, momento en el que decidió exiliarse en Francia. La llegada de los nazis, que describiría magistralmente en el ensayo “La agonía de Francia” (1941), le obligó a huir a Londres. Fue autor de una espléndida obra literaria, destacando sus libros sobre Rusia: “La vuelta a Europa en avión. Un pequeño burgués en la Rusia roja” (1929), “La bolchevique enamorada” (1930), “Lo que ha quedado del Imperio de los zares” (1931) y “El maestro Juan Martínez que estaba allí” (1934); o su libro más famoso, “A sangre y fuego. Héroes, bestias y mártires de España (1937)”. Su obra fue condenada al ostracismo durante medio siglo y redescubierto en la década de los noventa. Actualmente es considerado uno de los grandes periodistas y escritores españoles del siglo xx.

A sangre y fuego. Manuel Chaves Nogales. Libros del Asteriode.

Te puede interesar:

(*) Entrevista a Vicente Andújar. Autor de la novela: Tres republicanos

reseña de El jardín de los frailes. Manuel Azaña

4 comentarios:

  1. Una tentación muy grande estos relatos. Gracias por descubrírmelos!
    Besotes!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De nada, Margari. Gracias por tu visita. Un saludo.

      Eliminar
  2. Qué grande es Chaves Nogales. Este lo tengo pendiente de lectura. A mí me encantó Juan Belmonte, matador de toros. A los lectores anti-taurinos les echa para atrás este título pero es un imprescindible del autor porque no trata sobre toreros y tauromaquia, propiamente, sino sobre un hombre de Triana que se buscó la vida. Es maravilloso ese libro. Qué orgullo que este autor sea sevillano. Saludos Ginés

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias, Marisa G. La verdad es que debí haber incluido en su biografía también ese libro, pero como bien dices, podría haber 'herido sensibilidades' y el patio ya está bastante agitado con las cuestiones de género. Un saludo y nos seguimos leyendo.

      Eliminar