viernes, 26 de junio de 2020

La vuelta a España en 80 viajes de un día. Anaya Touring

Acaba el mes de junio y qué mejor manera de encarar las merecidas vacaciones que con esta propuesta: La vuelta a España en 80 viajes de un día (Anaya Touring). Una auténtica guía para viajeras y viajeros de las cortas largas distancias. 

   Suena a lo que es, pequeñas escapadas en coche o en moto a través de nuestra geografía. Cortas pero intensas, ideales para un día, un fin de semana o, como es notorio, para más de dos día si uno se anima y encadena varios destinos. Porque este verano no es un verano cualquiera, a nadie se le escapa la situación sociosanitaria vivida estos meses. Razón extra para estos viajes cortos, para dar La vuelta a España en 80 viajes de un día. O si no queremos ser tan ambiciosos, como decía, podemos ahorrar tiempo y dinero eligiendo entre todas las propuestas de este libro. 

   Los 10.000 kilómetros de rutas incluidas en La vuelta a España en 80 viajes de un día se disponen en el sentido de las agujas del reloj por las regiones y comunidades autónomas españolas. Hallamos desde mapas detallados a recomendaciones concretas sobre qué visitar y disfrutar incluido nuestro patrimonio histórico, monumental o natural. Del Miño al Bidasoa; A la sombra de los Pirineos, El Mediterráneo, Los paisajes de interior o el Archipiélago afortunado conforman la excelsa hoja de ruta de quienes no se conformen con quedarse en casa este verano. El índice de localidades al final del libro nos ayudará a localizar rápidamente los destinos. 

   Una guía imprescindible para desconectar entre las 80 propuestas rico en diversidad, patrimonio, cultura, arte y naturaleza. El viaje comienza aquí y ahora con La vuelta a España en 80 viajes de un día.

miércoles, 24 de junio de 2020

Pecar nunca fue tan saludable. Cristina Fernández Petit Fit

Pecar nunca fue tan saludable (Oberon) de Cristina Fernández, también conocida en las redes sociales como Petit Fit es un libro de recetas muy especial. Desde la portada ya apreciamos la palabra saludable en mayúsculas, pues la idea de la autora es esa: animarnos a preparar dulces en su versión más saludable. En la introducción, Petit Fit nos plantea qué idea le llevó a escribir este libro. 

   La repostería, nos cuenta, parece que siempre la asociamos con un estilo de vida menos saludable que los platos salados. Comenta que nuestro paladar se atrofia con el consumo de “todas esas guarrerías”, es decir: bollos, tartas, galletas y demás dulces industriales. Por eso, Petit Fit quiere cambiar ese concepto recordándonos que “la magia de la cocina saludable está en la buena selección de ingredientes y en la dosis de los mismos”. 

  En Pecar nunca fue tan saludable vamos a encontrar así 100 recetas dulces y saludables, variadas y, tal como nos indica la autora, no requieren de experiencia en repostería. Un libro de recetas con horas de amor, ilusión y dedicación, nos comenta, la mayoría exclusivas en Pecar nunca fue tan saludable. 

   A partir de ahí hallamos consejos generales, un listado de útiles básicos así como de ingredientes destacados y tablas de conversión. Destacar que encontraremos también postres sin horno, lo cual para estos meses de calor es más que interesante. Hay recetas tradiciones como el arroz con leche o la tarta de Santiago, las hay para “los más chocolateados” como el brownie-mousse de chocolate o los dónuts muerte de chocolate; también está el apartado “enquésate” con propuestas como el chesscake coulant o la quesada pasiega. Justo el chocolate parece ser la debilidad de Petit Fit, pues en este Pecar nunca fue tan saludable se convierte en el rey de los postres. Muestra de esto lo tenemos en esas versiones saludables de los donettes, galletas Príncipe, galletas Oreo, Huesitos o Phoskitos

  El apartado de recetas “Especiales” hace un guiño a ciertas festividades en las que sorprender a propios y extraños con delicadezas como el gofre de calabaza y chocolate, las torrijas de chocolate o el turrón de chocolate y coco. Lo sé, he hablado de estos meses de calor y puede apetecer quizás… un helado. Pues en Pecar nunca fue tan saludable también los encontraréis. Desde el Fitgopie (variante del famoso helado Frigopie de nuestra infancia) al Petitbon (otra versión de autora de otro clásico del chocolate) o una tarta helada tropical. Aún quiero hacer salivar a mis lector@s si menciono la mousse de moras o la tarta de San Martiño*. 

  Para quien quiera anotárselo, las recetas, además de unas fotografías de vértigo, incluyen fit consejos y una simbología acerca de posibles intolerancias o ingredientes veganos amén de los detalles de tiempos o los procesos detallados de elaboración. En definitiva, cien recetas variadas y saludables que pretenden hacer valer el título del libro: Pecar nunca fue tan saludable


Cristina Fernández Petite (Madrid, 1992), conocida en redes sociales como Petit Fit o como la chica adicta a la crema de cacahuete. Graduada en Magisterio de Educación Infantil con especialidad en Necesidades Educativas Especiales y con estudios de postgrado en Atención a la Diversidad y Apoyos Educativos. 

Pecar nunca fue tan saludable. Cristina Fernández Petit Fit. Oberon 

* Tarta de castañas tradicional de Ourense que se prepara durante las fiestas locales en noviembre.

lunes, 22 de junio de 2020

Noche y océano. Raquel Taranilla

Noche y océano (Seix Barral), de Raquel Taranilla es la obra galardonada este año con el Premio Biblioteca Breve. Lo primero que me pregunté es por el concepto de brevedad, ya que la novela se extiende más allá de las cuatrocientas páginas. No hay reproche, es una curiosidad literaria. De literatura y curiosidades también va esta novela. Noche y océano navega por las aguas de la ficción a partir de un personaje culto, mordaz y divertido. 

En realidad, todo ello en femenino, ya que hablamos de Beatriz, Beatriz Silva para más señas. Ella nos cuenta en un relato en voz protagonista un suceso en clave detectivesca. Porque hay otro personaje, masculino en este caso, sobre el que van a recaer ciertas sospechas. Nos faltaría el muerto. Uno muy muerto, embalsamado, sin cabeza. Ni más ni menos que el director de cine F. W. Murnau. También está un pez, que no se llama Wanda, sino Omega. Un pez cebra, para quien quiera saberlo. Volvamos a ella, a Beatriz. Sin hacer un descenso a los infiernos de Dante, guiño para los más sagaces, en cierto modo la protagonista nos sumerge en cierto océano del desencanto, la metaliteratura y el exotismo verborréico hasta rozar lo patológico. 

Porque Bea Silva es doctora en Sociología, se aburre en su trabajo como profesora de universidad, tiene treinta y dos años y una noticia parece despertarla de su letargo vital. ¿Qué noticia? La de la desaparición del cráneo de Murnau. Sospecha que ha sido otro director de cine, J. B. Quirós. Un vecino reciente con el que entablará una curiosa relación. Le escucha, mira, observa y se deja seducir en parte por la obsesión de este por el creador de Nosferatu o Tabú. Noche y océano es una suerte de novela confesional donde destaca no solo la voz de la protagonista sino el tratamiento formal en sí de la obra. Las notas a pie, lo lúdico, la ironía desbordante o el juego rompecabezas al hilvanar historias desde la trama principal le han valido sin duda el beneplácito del jurado del premio. El Biblioteca Breve 2020, como dije. 

Noche y océano es casi un lamento y un retrato lúcido de nuestra sociedad de conocimiento, una fotografía en blanco y negro entre lo real y lo ficcional, las luces y las sombras de un personaje que trata de escapar con humor de lo solemne aunque en esa huida venza la ironía y la aceptación del paso irreversible del tiempo. 

Una divertida novela satírica sobre la sociedad de la hiperinformación y el hiperconocimiento.

Raquel Taranilla (Barcelona, 1981). Además de escribir, es profesora de la Facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense. Antes impartió clase en la Universidad de Barcelona y en la Universidad Hamad bin Khalifa (Qatar Foundation). En 2015 publicó el libro autobiográfico Mi cuerpo también

viernes, 19 de junio de 2020

Destinos literarios. Sarah Baxter

Esta semana comparto con vosotros unas palabras acerca de Destinos literarios (Anaya Touring), de Sarah Baxter. El libro encuadernado en tapa dura cuenta con las bellas ilustraciones de Amy Grimes. El título resulta evocador ya por si mismo. Aunque creo que no comparto del todo ese subtítulo de “Guía del viajero inspirado”. 

   Sí coincido en que este Destinos literarios es una deliciosa guía útil no solo para viajeros (y, a su vez, no solo inspirados) Lo es también para quienes inspirados o no quieran viajar gracias a la magia de los libros. Y a la de sus autoras. En plural, pues si Baxter pone el texto, es innegable el aporte de Grimes a esta bella obra literaria. Es un libro que homenajea de algún modo a los escritores que construyen lugares en sus respectivos libros. Consiguen aquellos que esos lugares parezcan incluso más reales que cualquier fotografía de estos lugares. 

 Lugares literarios escogidos de la literatura mundial en este Destinos literarios. No todos, pues sus autoras han elegido de entre miles solo veinticinco. Lugares que se convierten en sus obras en personajes con derecho propio y, en esta obra, aún más. Desde el París de Los miserables contemplado por Victor Hugo al Dublín recorrido por Leopold Bloom de la mano de James Joyce en su Ulises. De las frías callejas del San Petersbugo en Crimen y castigo, de Fiodor Dostoievski a La Mancha de don Quijote. También Bath, la ciudad en el río Avon donde Jane Austen enmarcó sus novelas La abadía de Northanger o Persuasión comparten este singularísima guía junto al río Misisipi de Mark Twain o a la Cartagena de Indias de Gabriel García Márquez

   Veinticinco rincones emblemáticos para descubrir en los textos de Baxter en Destinos literarios, pero también para redescubrir en las ilustraciones a color, bellas, con ese punto naif, de colores vivos, sencillos trazados por Grimes.

   Qué buena propuesta la de este libro tanto si nos quedamos en casa viajando entre sus páginas o aceptando la propuesta de sus autoras en la presentación a viajar a los lugares reales. ¿Os animáis?

Sarah Baxter creció en Norfolk (Inglaterra) y en la actualidad vive en Bath. Su pasión por los viajes y la naturaleza la ha llevado a viajar por Asia, Australia, Nueva Zelanda y Estados Unidos antes de dedicarse a la escritura. Durante más de 10 años fue editora asociada de la revista Wanderlust. También ha escrito numerosos artículos de viajes para diversas publicaciones, como The Guardian, The Telegraph y The Independent. Fue también editora de la revista Unique Honeymoons y ha participado en más de una docena de guías Lonely Planet.

Amy Grimes es una ilustradora con sede en Londres que se graduó de Camberwell College of Art en 2014. Ha trabajado para clientes como Quarto, White Lion Publishing, Scribbler, UK Greetings y Papier. Sus ilustraciones, inspiradas por la naturaleza, representan motivos botánicos y paisajes frondosos. Son creadas principalmente pintadas a mano, escaneadas y finalizadas en collages digitales.

miércoles, 17 de junio de 2020

Del mal y sus signaturas. Nil Santiáñez

“El terror, el resentimiento, la abyección, el mal diabólico y el mal radical -nos comenta Nil Santiáñez en Del mal y sus signaturas (Alpha Decay)-, son algunas de las muchas máscaras del mal”. Porque en este original ensayo sobre el mal, Santiáñez, catedrático y profesor de literatura comparada de la Saint Louis University (Missouri), sostiene que a pesar de la enorme bibliografía sobre el tema, "se siguen usando los conceptos centrales relacionados con el mal con no poca imprecisión”.  Defiende así mismo que no puede haber una única definición del mal, por ello lo de las manifestaciones o “signaturas” del mal. En esa línea, el mal parece requerir un tipo de “aproximación multidisciplinar”. 

 En esa exploración del mal “multidisciplinar”, Santiáñez nos acerca a una mirada ética y reflexiva del mal estudiando y analizando cada signatura del mal “mediante la superposición de dos grandes ámbitos del saber: el de la reflexión filosófica y el de la representación cultural.” Un estudio, además, mediante “la técnica del contrapunto”. Santiáñez contrasta “lo que filósofos y pensadores por un lado, y escritores y cineastas por otro, han expresado sobre las signaturas del mal escogidas aquí.” ¿Cuáles son las las signaturas del mal escogidas en Del mal y sus signaturas? Pues encontramos siete: el resentimiento, la abyección, el mal radical, el mal absoluto, la banalidad del mal, el terror y el horror. 

   El autor recurre entre otros a Nietzsche, Miguel de Unamuno, Kant, el marqués de Sade, Pier Paolo Pasolini, Jorge SemprúnFriedrich Schelling o Joseph Conrad. Un ensayo original y bien trazado que es ante todo “una invitación a una toma de postura”. Porque según afirma Santiáñez en Del mal y sus signaturas, “todo vivir ético requiere un estado de vigilia moral atenta a los detalles”. El autor desglosa en el libro con claridad el significado de cada noción, de cada una de las siete signaturas referidas. También puede leerse este Del mal y sus signaturas como una invitación a generar una atenta mirada ética que en la sociedad contemporánea se ha ido desgastando. Una mirada ética al mal y a sus manifestaciones “que ha de conducir a la deliberación, a la crítica, a la protesta, a la acción política”. 

   Como subraya, en definitiva el autor en su Epílogo, no debemos subestimar el enorme potencial corruptor del mal ni su considerable habilidad para fascinar a quienes lo miran. Una contundente frase muy al hilo de lo que ya expusiera el filósofo alemán F. Nietzsche al enunciar: “Quien con monstruos lucha cuide de no convertirse a su vez en monstruo”.

Nil Santiáñez imparte cursos de cultura española, literatura comparada y estudios internacionales en la Saint Louis University (St. Louis, Missouri). Ha sido profesor visitante en numerosas universidades norteamericanas. Entre sus obras destacan: Investigaciones literarias: Modernidad, historia de la literatura y modernismos; Ángel Ganivet, escritor modernista: Teoría y novela en el fin de siglo español; y Goya/Clausewitz: Paradigmas de la guerra absoluta. 


lunes, 15 de junio de 2020

Ayúdame a mirar. Tino Soriano

Semanas atrás cayó en mis manos Ayúdame a mirar (PhotoClub), de Tino Soriano. Sus más de quinientas cuarenta páginas atestiguan antes incluso de bucear en ella que el subtítulo sea “la biblia del reportaje gráfico”. Quienes se acerquen al libro descubrirán una obra bien estructurada, con continuas referencias a profesionales de ayer y de hoy en el mundo de la fotografía y el reportaje gráfico. 

   Tanto para quienes sean (seamos) amantes de la fotografía como pasatiempo como para quienes se dediquen (o quieran dedicar) a ella de manera profesional, este libro creo que cubrirá sus expectativas. Porque en Ayúdame a mirar, Tino Soriano expone, ilustra, aconseja y advierte siempre desde la humildad y la profesionalidad que le inviste sus muchos años de profesión. Reseñar, se me antoja en estos momentos, es casi como tomar una buena fotografía. 

   No basta con mostrar, hay que contar algo, hay que plasmar una historia además de “comunicar inquietudes y emociones”, en palabras del propio Soriano. Inquieta acaso la manera de advertir al principio del libro qué se van a encontrar los diletantes a ser algo más que fotógrafos ocasionales. 

   Tomar una buena fotografía parece fácil, pero es (mucho) más que pulsar un botón, nos comenta. Desde la bienvenida al “club de los sufridores” a los requisitos y dificultades para los aspirantes a fotoperiodistas; desde los consejos sobre las ventajas de trabajar por libre o asalariado a la manera de superar los condicionantes técnicos pasando por la parte documental de la fotografía, la del atractivo de una buena historia, el del buen reportaje, la ética, la edición, sin olvidar el fotoperiodismo como religión o el márketing, Soriano repasa con mimo estos y otros conceptos con numerosos consejos prácticos. 

El maestro Robert Capa está muy presente en Ayúdame a mirar, algo que descubriremos desde el primer encuadre. Pero son muchas las voces a las que acude Soriano para pulsar y plasmar las opiniones y trucos de grandes profesionales del fotoperiodismo y el reportaje gráfico. 

   No podían faltar en este libro de consulta ni las anécdotas -que las hay, y muchas-, junto a fotografías emblemáticas al final del mismo. En resumen, Ayúdame a mirar, este ensayo amenísimo y práctico, además de entretenido, es una recopilación de lecciones aplicables a las y los amigos de la fotografía. Espero haber captado con estas palabras la esencia del libro. Haré mías aquí las palabras de Soriano cuando afirma al hilo del título, además, que “Todo consiste en el modo de mirar, como afirmaba Pablo Neruda”.

Tino Soriano (Barcelona, 1955) además de fotógrafo, es docente y escritor. Ligado profesionalmente a la National Geographic Society, es poseedor de numerosos reconocimientos nacionales e internacionales, ha sido premiado por la Unesco en varias ocasiones, con el Premio Nacional de Prensa en 2018 y  con el prestigioso Lente de Plata Mexicano (2004). Ha escrito libros sobre técnica fotográfica y se ha especializado en fotoperiodismo. Entre su obra publicada recientemente destaca: “Conectados a la Vida” (2009), “David contra Goliat. El día a día del cáncer infantil” (2011) o “Foto a foto: Perfecciona tu técnica y disfruta aprendiendo con 250 fotos comentadas” (2011).

viernes, 12 de junio de 2020

Cocina Zero Waste. Sebastian Simon


 
Cocina Zero Waste
 (Oberon) de Sebastian Simon es mucho más que un libro de cocina. Quienes se acerquen a él descubrirán 80 recetas originales, pero también cómo comprar, conservar y cocinar sin residuos. No en vano, su título “zero waste” significa cero residuos

¿Realmente se puede llegar a no generar ningún residuo en la cocina? Al menos podemos intentarlo, para ello Simon nos abre el libro explicándonos qué es eso del Zero Waste. En esencia, Zero Waste es un movimiento que surge como respuesta al cambio climático, los excesos de la contaminación, el consumismo desmesurado y el desperdicio de recursos. En su pretensión de desterrar la basura originada por nuestro día a día se engloban una serie de reglas como las 5R: rechazar, reducir, reutilizar, reparar y reciclar. 

Zero Waste es una filosofía de vida, un cambio en nuestra conciencia que si bien puede comportar al principio pequeños sacrificios también reporta grandes beneficios. Todos podemos hacer algo por el medio ambiente y por la sostenibilidad de nuestro planeta. También en la cocina. Para ello, Simon nos invita a hacerlo en  Cocina Zero Waste desde la elaboración de la lista de la compra. Una lista de la compra realista y sostenible. Pensando en qué tenemos en los armarios, la despensa y/o la nevera antes de arrasar con las existencias del supermercado. Luego sí, ya en el establecimiento aconseja desdeñar esos alimentos superenvasados, generadores de residuos. Comprar a granel siempre que sea posible. Productos de proximidad y de temporada con un guiño a los de agricultura ecológica. En el libro incluye tablas de estacionalidad del pescado, frutas y verduras, por cierto. 

  Quizá una de las claves de las recetas que Simon incluye en Cocina Zero Waste sean los ingredientes. Es fácil encontrar recetas de aprovechamiento a poco que uno bucee en internet. Lo que no es tan frecuente es hallar propuestas tan creativas con pieles de frutas o verduras. Incluso a la hora de cocinar restos de pasta, pescado u otros platos que en la mayoría de los hogares acabarían en el cubo de la basura. 

  Quien me recuerde que eso de la cocina de aprovechamiento ya lo hacían nuestras abuelas o quizás nuestras madres les diré que tienen razón. Justo por ello este movimiento, el de Zero Waste y las propuestas del libro Cocina Zero Waste deberían hacernos reflexionar a la vez que animar a ser más conscientes de lo que tenemos. Hagamos un pequeño esfuerzo para desperdiciar lo mínimo y cocinar de manera racional y saludable, pues este binomio no está peleado en las propuestas de Simon. Sé que os gusta que os regale la vista, así que aquí van algunas de las recetas de este libro. Que aproveche. Steak tartar con yema curada, galletas de coco sin gluten, piel de naranja confitada con chocolate, cuscús con leche, paté de bacalao, bibimbap coreano con restos de ternera o turrón de chocolate casero entre otras.

  
 Sebastian Simon nacido en Alemania, aunque canario de adopción, es especialista en marketing, relaciones públicas y redes sociales. Administra el exitoso blog gastronómico Gourmet Like Me. Ha participado en programas de televisión culinarios y ha publicado anteriormente la “Agenda Gourmet” editada dos años seguidos en España. 


martes, 9 de junio de 2020

“Dos gotas de perfume y otros relatos” Entrevista a Charo Martínez

Nos concede para La ardilla literaria una entrevista la artista valenciana Charo Martinez al hilo de su libro  “Dos gotas de perfume y otros relatos” (Ediciones Laso Pw) de venta en formato ebook en la plataforma de Amazon.

Lo primero que encontramos en “Dos gotas de perfume y otros relatos” es la imagen de portada. Creo que es parte de una obra de la cuál eres también autora. Háblanos de esa acuarela y de por qué la elegiste como portada de tu libro de relatos.

     El cuadro proviene de una fotografía que tomé de camino a Burano, una de las islas que  forman el archipiélago de la laguna veneciana.  Me gustó para portada del libro por su aspecto otoñal, pese a ser primavera en esa época del año, su uniformidad en cuanto a la falta de color me inspiró soledad y tristeza, características éstas que acompañan a algunos de los protagonistas de estos relatos.

    La faceta de pintora anidó en mí durante unos años, disfruté con ella descubriendo colores y formas inimaginables, hasta que un día cruzaron por mi mente las palabras. Elegí desarrollar esa nueva afición que se me presentó sin esperarla ni llamarla.

     Trece historias componen esta antología. Imagino que no eres supersticiosa. Curiosamente las y los escritores suelen tener sus manías a la hora de escribir o sus fetiches. Coméntanos a este respecto sobre tus supersticiones, afinidades o manías si las tienes o sobre alguna que te parezca llamativa de alguna autora o autor a quien admires.

   No soy supersticiosa y me siento afortunada por ello. Dado los tiempos en que vivimos en los que cualquier fenómeno normal lo convertimos y definimos, en demasiadas ocasiones, en paranormal, afectándonos a nivel conductual y modificando nuestras acciones en la dirección marcada por ello. Volviendo sobre el número de relatos que contiene mi libro, podrían haber sido diez o catorce. 

   Algunos autores, según he leído en sus biografías o entrevistas, tienen sus momentos más lúcidos durante la noche, disfrutando de una copa, en períodos de gran euforia o por el contrario de gran desamor. Cualquier de estas situaciones es buena si los resultados alcanzados son satisfactorios para el escritor o escritora. No es mi caso, si así fuera buscaría y aprovecharía los "idus de marzo”, pero no me son propicios. 

Leyendo tus relatos en esta antología nos damos cuenta de que eres de prosa breve, de historias cortas ahondando en la carga emocional del argumento de cada una. Háblanos de esta afición por la brevedad, por las historias concisas también con el respaldo de haber quedado finalista de un certamen literario recientemente.

  Me decanto por los relatos breves, por la intensidad en su escaso recorrido. Describen de forma condensada el sentimiento de los personajes, su estado  emocional, sus penas, sus pocas alegrías; lo que más subsiste y marca la existencia humana. 

   En cuanto a tu última pregunta, quedé finalista como tú bien dices y recuerdo el momento en que me lo comunicaron con  gran satisfacción. No hay duda de que es un reconocimiento que fortifica y da ánimos.  

Antes nos hablabas de tus acuarelas, de la de la portada; también la literatura y la música se cuelan en este libro. Me refiero al relato “Entre líneas” con la primera y al titulado “La estrella que más brilla”, con la segunda. Oímos, entre comillas, a Gloria Gaynor o a Joe Cocker. Coméntanos un poco la banda sonora que tiene o pondrías a cada uno de estos relatos. 

   Difícil tarea la de compaginar mis relatos con la literatura y la música en general, pese a todo lo voy a intentar.
   En el relato “Entre líneas”, quise experimentar otras voces en mis personajes y descubrí, casi por casualidad, que muchos autores escriben de forma universal, es decir a través de sentimientos primarios, negativos o positivos según el caso, pero que no difieren mucho o casi nada de lo que mis personajes hacen, piensan o sienten. La única diferencia estriba en cómo lo expresa cada autor, de ahí su originalidad y su maestría. En cuanto a la música que suena en el relato “La estrella que más brilla”,  elegí esas canciones por la asiduidad en que se escuchan en las discotecas y por su popularidad. Otros relatos no tienen la fortuna de tener su banda de música para no competir con las palabras que expresan los personajes.

Si tuviera que destacar otro rasgo común a estos relatos, además de la brevedad, es el tratamiento de los personajes. Se entretejen voces y protagonistas muchas veces luchando contra un destino aciago, inmisericorde, al que se enfrentan con mayor o menor entereza. Entre mis preferidos, sin duda, Martín el caracol. ¿Cómo ves tú, como autora, a estos personajes y a su devenir a lo largo de estas trece historias?

  El caracol Martín es el protagonista preferido de mis lectores. Sus méritos fueron apareciendo al mismo tiempo que su creación y, además, sin ninguna dificultad. Desprende ternura, sensibilidad, el afán por ayudar a costa de su propia integridad; su bondad, sus gestos y sus  consejos sin reproches, lo humanizan. No quiero olvidar sus miradas agradecidas a la naturaleza, sus divertidos juegos, a solas, sin esperar nada de nadie. Un comportamiento entrañable, siempre presto a ayudar, el que, por otra parte, debería ser inherente al ser humano.  

   El resto de los personajes cumplen su  función dentro de cada uno de los relato, digamos que son el hilo conductor de las vicisitudes que se describen y que forman la trama. O usando una expresión jurídica, son el cooperador necesario para la creación de la historia. 

Es inevitable que te pregunte por la situación sociosanitaria por la que estamos atravesando. Sin lugar a dudas, el mundo del libro se va a ver resentido. ¿Qué propondrías para animar a las y los lectores a no alejarse de los libro? Pensemos que durante el confinamiento la lectura ha sido más que un refugio. ¿Qué cambios prevés en el sector a corto o medio plazo? ¿Lo ocurrido potenciará de algún modo que se consuma más lectura en formato digital en detrimento del libro físico?

Me gustaría pensar que durante estas duras semanas de confinamiento, las personas se han refugiado en la lectura, en formato digital o en el soporte de siempre: el libro. Sé que algunos jóvenes han leído algún libro durante este tiempo y lo han comentado como un hecho inusual y agradable a la vez. Espero que persistan esa actitud. No obstante, tengo mis dudas, y a falta de algún tipo de información fiable, no puedo opinar  mucho, tan solo desear. Ojala que estos tiempos hayan sido fructíferos tanto en la lectura como en otras reflexiones encaminadas a un beneficio colectivo. 



lunes, 8 de junio de 2020

El beso del ángel. Andrés Pascual

El beso del ángel. Andrés Pascual

La imagen de la portada de El beso del ángel (Espasa), de Andrés Pascual, es una flor de estramonio. Una especie vegetal, la Datura stramonium, altamente tóxica utilizada desde la antigüedad por sus propiedades alucinógenas y medicinales. El estramonio puede causar intoxicaciones en animales de granja y la muerte en personas. 

En El beso del ángel aparece otra especie vegetal de la que no diré nada. También muertes como corresponde a un thriller. Pero si hay una planta a la que Andrés Pascual le rinde un extraordinario protagonismo es a la Vitis vinifera. A la vid y a al vino. Y de vino saben mucho en Logroño

Andrés Pascual no solo es un logroñés enamorado de su tierra, también nos hace partícipe de su devoción por La Rioja y el vino en esta novela. Reconoce en los agradecimientos que tras su novela A merced de un dios salvaje había prometido escribir otra novela ambientada en La Rioja

En los escenarios descubrimos no solo el encanto de la capital de provincias (sic), también algunos bucólicos paisajes de la rioja rural. Uno de los propósitos con este libro, leemos, era y es el de promocionar la cultura del vino junto al de impulsar a la capital riojana como destino enoturístico de primer nivel internacional. Creo que en eso lo ha logrado, porque la novela se embellece en descripciones y decorados riojanos como una invitación velada a visitar esta comunidad autónoma. No en vano, uno de los escenarios capitales es una bodega. Y el que su nombre lleve el año 1521 no es casual, sino bien hilado con la historia de La Rioja

Si me dejo caer por el argumento de El beso del ángel como lo haría un caldo por una copa de vino, diré que es un thriller social. Narrado en primera persona, en presente, con algún salto temporal en contrapunto para reforzar la trama. La protagonista es Camino Tejada. Hija de un afamado chef, tiene que renunciar a su carrera profesional como periodista en el extranjero para regresar a su ciudad natal, a Logroño. Secretos y dramas familiares que vamos desvelando página a página se complican aún más durante un evento enocultural. La inauguración de una bodega en la que aparece asesinada una instagramer y cuya investigación apunta a Lucas, el hermano rebelde de Camino. La investigación policial irá descubriendo más secretos, chantajes, desapariciones y torturas porque la jovencísima celebrity local no será la única víctima de “la bestia”. 

Las intrigas familiares y la investigación periodística para hallar al hermano desaparecido hacen vibrar la trama de El beso del ángel en una espiral de descubrimientos, denuncia social y guiños constantes al paisaje y paisanaje riojanos. 

Andrés Pascual Carrillo de Albornoz (Logroño, 1969) ha ejercido durante veinte años como abogado. Viajero incansable, actualmente vive en Madrid, donde se dedica a escribir, a impartir conferencias y a crear contenido emocional para empresas. Es además pianista y compositor de formación clásica, habiendo formado parte de diversas bandas de rock. Sus libros han sido traducidos a nueve idiomas. Su novela Taj (2016) obtuvo el Premio de Novela Histórica Alfonso X el Sabio. También ha publicado: El guardián de la flor de loto (2007), El compositor de tormentas (2009) finalista del VIII Premio de Novela Ciudad de Torrevieja, El haiku de las palabras perdidas (2011), El sol brilla por la noche en Cachemira (2012), Edén (2014), El viaje de tu vida (2016) y A merced de un dios salvaje (2018).

viernes, 5 de junio de 2020

Playas de España que no te puedes perder. José Alejandro Adamuz

Playas de España que no te puedes perder. José Alejandro Adamuz.

Hay libros como este Playas de España que no te puedes perder (Anaya Touring), de José Alejandro Adamuz, que son un goce para la vista. Ya el formato es una pura invitación a hojearlo y ojearlo en la librería.

Apaisado y con unas fotografías impresionantes a color, incluídas las desplegables de las solapas interiores, es un libro que recomiendo hoy por partida doble. Por una parte, hoy es 5 de junio. Que es como decir el día mundial del medio ambiente. Cuidar el paisaje, sobre todo las playas, nuestro litoral, es y debe ser un compromiso cuando nos acerquemos a ella. Ya sea de paseo, de turismo o para pasar una jornada. 

Justo en un día como hoy debemos tomar conciencia de conservar el entorno litoral como parte de un ecosistema donde viven más seres ademas de nosotros, los humanos. La otra recomendación es porque llega el verano, la situación de excepcionalidad que vivimos como sociedad parece darnos una tregua en estos meses tan señalados. Muchas y muchos acudiremos a las playas a descansar, a relajarnos, quizá a conocer nuevos enclaves. En ese sentido Playas de España que no te puedes perder nos desvela capítulo a capítulo rincones para disfrutar. 

El libro está dividido en zonas, desde el Norte al Sur, pasando por el Este y las Islas. Playas de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia, Andalucía, Baleares y Canarias

Playa de Mónsul (Andalucía)
En cada playa, además de la información práctica acerca de las características de la playa, el acceso o qué visitas hallamos un texto descriptivo. Porque  Playas de España que no te puedes perder es una estupenda guía de viajes y a la vez un libro con una narración sobre ese paisaje ilustrado a todo color. Tras cada sección encontramos además un apartado titulado “Tampoco te puedes perder”. Son otras playas que como nos recomienda José Alejandro Adamuzcolaborador de National Geographictampoco podemos perdernos. 

Más de 130 playas de nuestra rica y hermosa geografía. Belleza y mucho más en las que desconectar, hacer deporte o descubrir algún secreto. Incluye información acerca de los servicios o si es apta para personas con movilidad reducida y/o mascotas. 

Este verano disfrutemos de nuestras playas de forma sostenible conscientes de la grandeza de nuestro patrimonio litoral. Buen fin de semana.

jueves, 4 de junio de 2020

La obsolescencia programada de nuestros sentimientos. Zidrou & Aimeé de Jongh

La obsolescencia programada de nuestros sentimientos. Zidrou & Aimeé de Jongh. 

Leer esta novela gráfica de tirón no ha sido fácil. Ha habido una buena razón. Hace tiempo que no me emocionaba leyendo un libro y es justo lo que han conseguido Zidrou & Aimeé de Jongh con su La obsolescencia programada de nuestros sentimientos

Los dos protagonistas de esta historia tierna, emotiva y reflexiva son Ulises, de 59, y Mediterránea, de 62. Viven en Francia, aunque su historia podría suceder en otro lugar, prima la fuerza del argumento y el pulso narrativo de sus protagonistas. Al igual que sucede al principio de la novela de Paolo Giordano, La soledad de los números primos, conocemos a Ulises y a Mediterránea por separado. Oímos sus pensamientos y reflexiones. Luego, como en la citada novela, él y ella se encuentran. A partir de ese punto la historia gana en matices y en hondura emocional. 

La obsolescencia programada de nuestros sentimientos nos muestra que la edad de las personas es solo aparente. Que envejecer no solo es un lujo, sino un proceso inherente a la vida. Vida. Un canto a la vida, a la esperanza y a la búsqueda de la felicidad a pesar de los convencionalismos sociales. Mediterránea se mira en el espejo, se ve, evoca el pasado consciente de que hay arrugas más visibles que otras. También Ulises se mira, piensa como la letra de aquel tango de Carlos Gardel que "las nieves del tiempo platearon mi sien"; mira y se mira, quizá no tanto en el espejo del baño, sino en el de su entorno: sus amigos, su familia, su casa. Inevitable como la propia transición entre la infancia a la madurez o a la fase siguiente puede ser dejarse llevar por los nombres propios de La obsolescencia programada de nuestros sentimientos

Zidrou & Aimeé de Jongh no esconden ese sutil binomio entre Ulises y Mediterránea. Lo hacen introduciendo además un guiño a la Iliada de Homero. También otros nombres de esa obra literaria universal. Quizá porque como el literario Ulises hay un viaje y una espera, un principio femenino y un mar. Una isla y un regreso. Pero sobre todo hay una lúcida visión de quien ha vivido y quiere seguir viviendo pasados los cincuenta años. Porque como decía Gardel en su "Volver", cuarenta años no es nada y cumplir veinte más, tampoco si se tiene ilusión por el futuro.

Destacar el trazado de las viñetas, las ilustraciones en colores cálidos, otoñales, metafóricos. También el lenguaje, esas frases breves, reflexivas que acompañan a las viñetas en ocasiones como instantáneas de papel a lo largo de los siete capítulos de este La obsolescencia programada de nuestros sentimientos