viernes, 30 de noviembre de 2018

La buscadora de setas. Long Litt Woon


Este es un libro que le recomendaría sin dudarlo a mi padre. Fue él quien me enseñó, hace años, a buscar setas en el bosque. Recuerdo que me hablaba emocionado de las setas de cardo, de las que crecían en los pinos o de los níscalos -que preparaba de una manera tan sencilla como deliciosa. Ahora mi padre ya no sale al campo, no irá a buscar setas -por prescripción facultativa-, quizá con suerte pueda enseñarle las fotografías que aparecen en ‘La buscadora de setas’ (Maeva ediciones) y verle sonreír o asentir con la cabeza si reconoce alguna.

De alguna manera este libro no solo me ha evocado mi juventud con emoción, también creo que era en parte el propósito de su autora. Long Litt Woon lo escribió tras una pérdida, la de su marido, Eiolf Olsen. Nacida en Malasia, en 1958, se fue a Noruega como estudiante de intercambio donde conoció a Eiolf. Se casó y creó un hogar. Un día su mundo cambió, de repente. La muerte inesperada de su marido hizo que Litt Woon tuviera que afrontar un proceso de duelo en búsqueda de respuestas en un viaje personal de autoconocimiento y superación del dolor. Y las setas aparecieron en él. Se unió a Los Recolectores de Setas, un grupo que se dedica a su estudio y recolección.

Con el tiempo, Litt Woon se ha convertido en una experta en setas y, también con el tiempo, decidió escribir este libro de memorias en el que nos muestra las setas no solo como un alimento selecto y, a veces, como un peligroso veneno; también nos explica su historia y su importancia cultural.

Como señalé, en el libro encontraremos fotografías a color, también un decálogo para principiantes, un valiosísimo glosario con nombres vulgares y académicos de un centenar de setas, así como su valor gastronómico. Hayaremos multitud de curiosidades, desde algunas recetas para cocinar setas -más allá de freírlas con aceite-, a un capítulo muy ‘sociológico’ en el que recoge, además de testimonios de consumidores de setas alucinógenas, una tabla con los distintos ‘niveles de viajes’.

Recuerdo que mi padre me advirtió un día de una seta con aspecto sospechoso. Él tenía su truquillo, decía, para saber si una seta era o no venenosa. No me fié entonces de ese método y, tras leer el capítulo ‘Cincuenta variedades de veneno’, ahora tampoco, aunque descubriremos que no es tan fiero el león como lo pintan.

Confío en que este libro despierte la curiosidad entre quienes busquen una historia de superación personal, una historia real, tanto como entre quienes se acerquen con interés micológico. Creo que unos y otros saldrán contentos de su lectura.


Long Litt Woon, en cuyo nombre chino "Long" corresponde a su apellido, y "Litt Woon" a su nombre, es antropóloga y experta en setas. Actualmente vive en Oslo. Con este libro ha obtenido gran repercusión, tanto por parte de los medios como de los editores internacionales.

La buscadora de setas. Long Litt Woon. Maeva ediciones. ISBN:978-84-171087-8-6


miércoles, 28 de noviembre de 2018

Entrevista a Raquel Martínez


Mi entrevistada en esta ocasión es Raquel Martínez Guzmán. Ha publicado el libro ‘El cuaderno de Julia’ (NPQ editores), que inicia una colección de libros infantiles destinado a niños/as con dificultades de aprendizaje. Concretamente, ‘El cuaderno de Julia’ está dirigido a niños/as con altas capacidades. Raquel Martínez es licenciada en Psicología especialista en el ámbito clínico con niños con dificultades conductuales, emocionales y de aprendizaje.

La primera pregunta es obvia, pues me interesa saber cómo surge la idea de este proyecto tan interesante, la de escribir ‘El cuaderno de Julia’.
La idea de éste proyecto de cuentos surge hace unos diez años, a partir de mi experiencia docente como educadora en centros de educación infantil de 0 a 3 años, que es cuando empiezo a entender la importancia que tiene la imagen en el aprendizaje, incluso antes de que los niños/as puedan hablar, leer o dibujar.
Como psicóloga, trabajo en el ámbito clínico con niños con dificultades conductuales, emocionales y de aprendizaje utilizando recursos creativos como la pintura, el dibujo y los cuentos y, a menudo, me encuentro con que existe poco material dentro de la literatura Infantil destinado específicamente a niños/as con dificultades de aprendizaje como la superdotación, el trastorno de Asperger o las dificultades de atención.

En ‘El cuaderno de Julia’ vamos a encontrar a Julia, un personaje narrador que nos cuenta que con dos años ya se notaba que era especial. Háblanos de a qué edades pueden aparecer los primeros indicios o rasgos conductuales de que estamos ante niños y niñas con altas capacidades.
Cada niño/a es un mundo, y es cierto que existen signos precoces que nos pueden indicar que existe buena dotación intelectual, como la facilidad para conseguir de forma precoz ciertos hitos evolutivos como la lectura o la inquietud por intentar conocer las cosas más a fondo que pueden verse en niños ya muy pequeños, sin embargo, señales de alerta como la escasa tolerancia a la frustración, la ansiedad o la implacable autocrítica no se distinguen hasta más adelante, y es por eso que se considera que antes de los 12 años es muy difícil hacer un buen diagnóstico.
Háblanos de la didáctica de las ilustraciones que incluyes en ‘El cuaderno de Julia’. Supongo que tan importante es el uno con estas, sobre todo para ganarse a los lectores más pequeños de la casa.
Siempre he sido una amante del arte y el dibujo ha sido para mí un juego cuando era niña y un medio de expresión siendo adulta. Las imágenes y personajes de ‘El cuaderno de Julia’ son cómicos y han sido creados para tal fin, entretener y divertir, aparte de informar o aportar conocimiento.

Dado que ‘El cuaderno de Julia’ puede adquirirse, además, en la web www.eldivándeguzman.com, tanto en formato físico como digital, quiero preguntarte por las nuevas tecnologías y soportes informáticos en el ámbito del aprendizaje escolar y en el seno de la familia. ¿Cómo y cuándo deben emplearse estas tecnologías y dispositivos según tu criterio?
Aunque es cierto que vivimos en una era en la que los niños y niñas ya conviven con todo tipo de tecnología debemos saber que no existe una edad ideal para que los menores empiecen a tener contacto con Internet y las nuevas tecnologías, yo siempre recomiendo que a una edad temprana siempre y cuando esto suceda con el acompañamiento de los padres y que éstos estén decididamente implicados en ayudarles en hacer un buen uso de éstas herramientas que les van a ser muy útiles el futuro. Por supuesto soy reacia a dejarle al niño o niña un móvil o tablet antes de los tres o cuatro años, de manera que con edad temprana me refiero una vez pasada la etapa infantil.
Indicaba que ‘El cuaderno de Julia’ forma parte de una colección de tres libros educativos, ¿para cuando el segundo, ‘El cuaderno de Jorge’, y qué vamos a encontrar en él?
No tardaré en sacar el segundo volumen de la colección de mi proyecto, y con muchas ganas. En ‘El cuaderno de Jorge’ vamos a encontrar una problemática muy de actualidad, una dificultad muy de nuestro tiempo, muy “de todos”, y que considero que es resultado de una sociedad que está estresada y ha olvidado el aquí y el ahora, siendo el niño/a el que sufre las consecuencias. Hablamos de los problemas de atención, los trastornos como el TDAH o el TDA, que en ocasiones es una respuesta de los niños/as a la alta exigencia del ambiente que le rodea.
El cuaderno de Julia. Raquel Martínez. NPQ editores. ISBN 978-84-946627-2-0

lunes, 26 de noviembre de 2018

Entrevista a Óscar Hernández Campano


La casualidad me llevó no ha mucho a conocer en la presentación de una novela de una amiga, a Óscar Hernández Campano. Mientras mi amiga Mila firmaba ejemplares de su última, Óscar y yo nos quedamos charlando. Me habló de sus novelas y en unos días me llegaron a casa, agradecidísmo a la editorial Egales, ‘El viaje de Marcos’, ‘El guardián de los secretos’ y ‘Esclavos del destino’. Precisamente por esta última le pregunto en esta entrevista.


Fijándome en los detalles de ‘Esclavos del destino’ llego al color blanco, el que también busca -y al que acude- Josep, el protagonista de esta novela. Un blanco metafórico que viniendo de un valenciano que se va a vivir al Norte de España parece cobrar una dimensión más allá de lo sinestético, ¿nos lo comentas?

   Para Josep el blanco es la ausencia de imágenes. Significa poner la mente en blanco, ahuyentar cualquier imagen de su mente y ocultar -de nuevo- su verdadera identidad, sus deseos, sus fantasías. Josep acude al color blanco cuando siente que su mente trata de traicionarlo, cuando sospecha que trata de mostrarle imágenes que no quiere ver. Ese blanco sería una metáfora de la luz cegadora que lo oculta todo.

Y del color a los cameos de obras literarias que van salpicando ‘Esclavos del destino’. Imagino que no es casual que aparezcan autores como Saramago, Salgari, Verne, Caneti (Masa y poder), Dante, Homero, Carrol (A través del espejo), Tolstoi, Shakespeare, Cernuda, Whitman, Atxaga, Lope de Vega, Poe, Xingjian... O un escritor que no le sonaba de nada a Josep, el autor de la novela ‘El viaje de Marcos’; buen guiño este. Coméntanoslo.

   Un libro es un compendio de muchas cosas. A mí me gusta que una novela, además de contarme una historia, de entretenerme, me enseñe, me ilustre y me enriquezca. Así que, como autor, trato de incluir los títulos de otros libros que han significado algo importante para mí, o que considero que son valiosos para la sociedad. Y los pongo ahí para que los personajes los lean o para que los lectores los conozcan y los lean también. Muchos de los títulos que salpican mis obras me han marcado de forma especial y los considero imprescindibles. Por eso los comparto. En cuanto al guiño del que me hablas, fue una broma que me pareció divertida incluir. Los autores somo esencialmente desconocidos para la mayoría de las personas. Solo los más conocidos serían identificados por una parte -y no muy grande- de la población. Eso es una realidad y me pareció que era una ironía divertida. Además, como admirador del cine clásico que soy, me parece un bonito homenaje al maestro Hitchcock y, desde hace tiempo, salgo en mis novelas como el cineasta aparecía en sus filmes.

Los escenarios no podían quedarse en mera comparsa en esta novela, hay una profusión de descripciones sobre San Sebastián y algunas breves sobre Valencia: la Catedral y el barrio del Carme.

   Claro, porque esta novela quería además homenajear a dos ciudades que son mis ciudades: la que me vio nacer y crecer, Donostia, y la que me ha acogido, València. Durante un tiempo, al igual que Josep, yo viajaba en autobús desde San Sebastián a València y viceversa. Fue precisamente en uno de aquellos viajes en el que se me ocurrió la historia de Esclavos del destino. Me llamó la atención la gente tan variada que acudía a la estación de autobuses a recibir a los viajeros o, en su caso, a despedirse de ellos. ¡Cuántas historias detrás de cada abrazo y de cada adiós! Le estuve dando vueltas y como mi viaje duraba más de ocho horas, al llegar a València ya tenía la novela estructurada en la mente. Volviendo al tema de las descripciones, te diré que me gusta que quien lee alguno de mis libros pueda ir después a seguirle la pista a los protagonistas. Muchas personas me han enviado fotos desde los escenarios donde suceden las historias de mis libros. Me ha ocurrido mucho con El guardián de los secretos. Muchos lectores han visitado Peñíscola en busca de la cueva de los secretos, del embarcadero o, incluso, del cementerio. Recuerdo que ubicar El viaje de Marcos en un pueblo imaginario de la Mancha, provocó que mucha gente me dijera que le hubiera encantado visitar Molinosviejos. Así que decidí que en Esclavos del destino todos los escenarios serían localizables y reconocibles.

Óscar Hernández Campano (Donostia-San Sebastián, 1976). Escritor desde siempre, estudió Derecho y trabajó como profesor de Geografía e Historia. A los 16 años publicó ‘La aventura más excitante de los últimos diez mil años’, una novela juvenil. Ganó el Premio Odisea en 2002 con la aclamada ‘El viaje de Marcos’, todo un clásico de la literatura LGTB. Premio Beatriz Vicente de relato con ‘Maitasunaren ispiluak’ (Espejos de amor), ha publicado el relato ‘Infinitos besos’, y recientemente ‘¿Azul o verde?’ en la antología ‘Lo que no se dice’ (Editorial Dos Bigotes, 2014). Participó también con el relato ‘El amor os hará libres’ en una antología coordinada por el Instituto Cervantes de Nápoles. La editorial Egales ha publicado en 2016 su novela ‘El guardián de los secretos’, ‘El viaje de Marcos’ y recientemente ‘Esclavos del destino’. Amante de la literatura y del cine, organiza un cineclub de clásicos y presenta un programa de radio sobre el séptimo arte en Ràdio Túria.

Óscar Hernández Campano presentará su novela ‘Esclavos del destino’ este martes 11 diciembre a las 19,30h en la librería Tirant lo Blanch de Valencia.

Esclavos del destino. Óscar Hernández Campano. Editorial Egales. ISBN: 978-84-17319-19-9

jueves, 22 de noviembre de 2018

Presento, luego existo. Miguel Ángel Guisado


Lo primero que llamó mi atención de este libro fue su título. ‘Presento, luego existo’. Obviamente, me recordó de inmediato a esa locución latina: Cogito ergo sum atribuida a René Descartes. Un verdadero planteamiento filosófico que Miguel Ángel Guisado, el autor de Presento, luego existo (Ed. Gestión 2000) lleva a la práctica desde el enfoque de las presentaciones.

   Lo segundo que me llamó la atención fue la propia portada, pues destaca un elemento de color rojo sobre otros en negro a modo de metáfora que también se aprecia en el interior del libro. Porque Guisado nos regala en esta obra un auténtico manual de cabecera para quienes tengan que enfrentarse a una presentación de manera exitosa. El lenguaje es claro, ágil, con ejemplos y un delicioso sentido del humor.

  Guisado repasa los puntos clave de una buena presentación con una declaración de principios indudable, la de qué NO es una presentación. Y no es una simple declamación apresurada de una serie de datos al tiempo que uno señala con más o menos pericia una pantalla en una sala en penumbra. Es muchísimo más, sin duda. Así nos lo muestra desde su experiencia, como un acto de comunicación a menudo fundamental para el prestigio profesional del presentador.

   Otra de las cuestiones que me planteé mientras leía ‘Presento, luego existo’ era si los consejos que iba a encontrar tendrían aplicación fuera del ámbito laboral. Es decir, si además de repasarse en él todos los aspectos esenciales para llevar a cabo una presentación exitosa, podía importar aquellos a la vida cotidiana. Y la respuesta es que ya en el seno de una organización, ya frente a otras empresas, en congresos, o en las posibles intervenciones públicas, este libro ameno --y casi conversacional--, promueve un cambio de mentalidad respecto al enorme potencial de las presentaciones.

   La palabra clave para Guisado es la persuasión. Es decir, que debemos tener claro lo que queremos conseguir con la presentación y persuadir a nuestra audiencia mediante la credibilidad, los datos y las acciones presentadas, pero también a través de la emoción que se sepa comunicar. Ahí está la clave de la persuasión, en lo que Guisado llama el ADN de las presentaciones: la suma de Actuación, Diseño y Narrativa.

   Espoleado por este planteamiento, agradecido por lo aprendido con ‘Presento, luego existo’, me puse en contacto con el autor para entrevistarle. En breve compartiré la entrevista aquí.

   Miguel Ángel Guisado es ingeniero superior industrial y diplomado en Alta Dirección de Empresas. Actualmente es asesor de Comunicación Directiva en Habilor, empresa que fundó para formar y asesorar a profesionales en sus presentaciones e intervenciones públicas. Es, asimismo, conferenciante y profesor visitante de habilidades de presentación y comunicación directiva en varias escuelas de negocios.

Presento, luego existo. Miguel Ángel Guisado. Editorial Gestión 2000. ISBN 978-84-98754-76-6


viernes, 16 de noviembre de 2018

Mitos y verdades del cerebro. Francisco Mora


He tenido la oportunidad de leer estos días el libro Mitos y verdades del cerebro (Paidos), de Francisco Mora. Curiosamente su lectura me ha llevado a reflexionar, por una parte, sobre ese neologismo que se ha colado en nuestras vidas: la posverdad. Y, por otro, casi relacionado con este, con lo que se han venido a llamar fakes news. Para quienes no tengan una definición a mano sobre posverdad, o mentira emotiva, vendría a ser una distorsión deliberada de una realidad, para crear o modelar la opinión pública a fin de influir en las actitudes sociales.
Más o menos.
Y comento esto porque en Mitos y verdades del cerebro su autor, uno de los mayores expertos en neurociencias de nuestro país, Francisco Mora, nos va descubriendo algunas de las verdades -y también de las mentiras- que nos han ido contado acerca del cerebro. Y si las posverdades y las fake news parecen estar de moda, también lo está hablar del cerebro y de nuevos descubrimientos sobre él. Quizá debido en efecto a los grandes avances en neurociencias aportados por la comunidad científica.
Entre los capítulos de Mitos y verdades del cerebro destaca el de los ‘neuromitos’, los mitos sobre el cerebro, en el que nos asomamos a esa creencia de que solo utilizamos un 10% de nuestro cerebro o el mito del efecto Mozart entre otros.
Frente a ese confuso mundo de falsedades e historias que, -sin intencionalidad consciente, entendemos- incide y repercute negativamente en las relaciones humanas, Mitos y verdades del cerebro vendría a ser una suerte de antídoto ofreciendo una perspectiva abierta que ayude a hacernos conscientes de las falsas verdades sobre el cerebro, nuestra concepción de lo que somos y cómo nos comportamos. 

Francisco Mora es doctor por las universidades de Granada (España) y Oxford (Inglaterra). Es profesor de Fisiología Humana en la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid y profesor adscrito de Fisiología Molecular y Biofísica en la Facultad de Medicina de la Universidad de Iowa en Estados Unidos. Es autor de varios libros de ensayo, entre los que destacan El reloj de la sabiduría (2005) y Neurocultura (2007).

lunes, 12 de noviembre de 2018

Entrevista a Juan Llorca y Melisa Gómez


La semana pasada traía la reseña del libro ‘Sin ientes y a bocados’ (Vergara editorial) y esta la entrevista al autor. En realidad, a mi paisano, el Chef Juan Llorca y a la nutricionista Melisa Gómez que ha colaborado también en el libro.
La idea de escribirlo me dice Juan que surgió de los dos y también por dos motivos principales. La cosa parece venir en pareja.
Me comenta Juan que el primero de esos motivos fue porque «la oferta de libros destinados al BLW era de un gran contenido pero a mi humilde y subjetivo parecer un poco aburridos, y al final como todo nos tiene que entrar también por la vista
Respecto al segundo, me comenta que fue «por resolver la cantidad de dudas que nos hacen llegar por las RRSS respecto a este tema. Así que unimos las dos partes, se nos ocurrió este título tan chulo y nos pusimos a ello, pero para nada pensamos en su día que tuviera tan buena acogida».
P.: Melisa, ¿qué sistema habéis seguido a la hora de coordinaos a la hora de redactar y maridar (si se me permite la palabra) la parte que ha aportado cada uno?
   R.: Lo primero que recuerdo que hicimos fue sentarnos y poner en común las inquietudes que las familias nos venían compartiendo a través de las redes y de nuestros trabajos y buscamos abordar estas cuestiones de la forma más práctica y amena posible, redactamos un índice entre ambos, yo me encargué de los consejos a considerar en cada etapa y Juan de redactar un listado de recetas para que juntos valorásemos cuáles incluir en cada etapa, tras lo cual desarrolló las recetas y preparó las que fotografiaría y nos reunimos nuevamente para preparar las fotografías. El contenido fue maquetado por Sonia Moncholí que hizo un trabajo increíble y logró que quedase un resultado muy bonito y finalmente Marina MissCrane se encargó de diseñar la portada que envolvería todo este trabajo.
P.: Juan, además de los consejos sobre hábitos alimentarios es curiosa la aparición de dos recomendaciones un poco al margen del objetivo del libro, aunque igual de interesantes. La de realizar un curso de primeros auxilios para atender a los bebés y el relativo al pinzamiento tardío del cordón umbilical en el momento del parto. Háblanos sobre ello.
   R.: Dos puntos muy importantes, los primeros auxilios por el miedo que pueden tener las familias al atragantamiento, aunque no está demostrado que una dieta con triturados tenga menos posibilidades en estadísticas, pero yo iría un poco más allá. Creo que todo el mundo deberíamos hacer un curso de primeros auxilios, nunca está de más, ¿no crees?
   Y el pinzamiento es que se está demostrando que si se retrasa el corte unos segundos, el paso de sangre al niño es mayor en el momento del parto, y esto le aporta un mejor sistema inmunitario a corto y largo plazo y más reservas de hierro.
P.: Entre los ingredientes de las recetas que incorpora el libro me ha sorprendido ver especias como el curry, la canela, la cúrcuma o la nuez moscada. Pensé que algunas de estas contenían principios activos quizá parcialmente contraindicados a niños de corta edad. P. ejem., la cúrcuma para niños menores de 3 años.
   R.: Ninguna de estas especias estará contraindicada en las pequeñas cantidades que suelen utilizarse para dar un toque de sabor, aquí abogamos un poco al sentido común y al buen uso de las mismas, porque podrían tanto dar un punto de sabor como convertir un plato en intolerable hasta para nuestro paladar. En otras culturas los curries forman parte de los primeros platos que prueban los bebés y los ofrecen a partir de los 7 meses. En el libro se ofrecen a partir de los 9 meses y puede ser una opción a disfrutar en familia y explorar nuevos sabores para el paladar de grandes y pequeños.
P.: Juan, vemos a lo largo del libro que los hábitos alimentarios pueden marcar una correcta alimentación de los niños, me gustaría saber si se ha realizado algún tipo de estudio científico que relacione los hábitos a estas edades tempranas con los que puedan tener más adelante, a más edad.
   R.: A esta parte no sabría contestarte, si te soy sincero, con un estudio, pero la lógica me dice que si, ¿no? Si desde pequeños tenemos una relación directa sabiendo lo que comemos, qué alimentos y conocemos su sabor real. Por ende, deberíamos estar dándoles una mejor relación, educación alimentaria y a la larga una mejor o al menos herramientas para que ellos solos sepan elegir y diferenciar de lo que es saludable y lo que no.
P.: Melisa, me gustaría preguntarte, un poco en la línea de la anterior, por la presencia en varias recetas del aceite de coco o la levadura química como ingredientes sanos y/o saludables para niños tan pequeños.
   R.: En el caso de las recetas que incluyen el aceite de coco, las características de las mismas lo hacen mejor opción que otros aceites (al tratarse de bolitas, permiten que la masa quede suave y maleable para darles la forma y no alterará su sabor como podría hacerlo el aceite de oliva, por mencionar un ejemplo). En el caso de la levadura, se utiliza en el bizcocho sugerido para el primer cumpleaños y no es considerada un producto insano.
   Aprovecho en este apartado de mencionar que el ofrecer o agregar alimentos fuentes de grasas en algunas preparaciones (principalmente aceites, aguacate y cremas de frutos secos) no está contraindicado en estas edades y que no solo no ocasionará problemas sino que podrá aportar beneficios, y aunque todos estaremos de acuerdo en que será mejor priorizar el aceite de oliva por encima de los demás aceites, esto no excluirá el uso puntual de otras opciones.
Sin dientes y a bocados. Juan Llorca. Vergara editorial. ISBN 978-84-16076-88-8

jueves, 8 de noviembre de 2018

Sin dientes y a bocados. Juan Llorca


Sin dientes y a bocados’ (Vergara editorial) es un libro para usar y poner en práctica si se tienen bebés en casa. También es un excelente regalo si no es el caso, porque este libro único hará las delicias de grandes y pequeños, aunque especialmente de los más pequeños. Un libro que a su vez es una guía sobre el método Baby Led Weaning o BLW. Este método, que en realidad es también una filosofía saludable, nos acerca a la alimentación complementaria regulada y dirigida por el propio bebé. En especial desde los seis meses al primer año.

El libro explica de forma amena y práctica qué es el Baby Led Weaning o alimentación autorregulada por el bebé, incluyendo sus beneficios y la respuesta a las múltiples dudas que se suelen hacer los padres en este tránsito nutricional. Hay apartados acerca del método a distintas edades dentro de ese primer año de alimentación complementaria, un calendario de incorporación de alimentos y recetas. Una buena cantidad de recetas por edades en las que se tiene en cuenta como ofrecerle los distintos alimentos, las posibles alergias y consejos sobre qué añadir o tener en cuenta en casos concretos. Incluye recetas veganas, sin gluten, sin lácteos y menús sugeridos.

En definitiva, un libro práctico, útil y doblemente responsable que propone a padres y educadores ofrecer a los más pequeños de la casa las mismas preparaciones que coma el resto de la familia, de manera progresiva, con pequeñas adaptaciones.

Un libro de Juan Llorca en colaboración con la dietista-nutricionista especializada en pediatría, Melisa Gómez,

Juan Llorca (Valencia,1979) es Chef responsable de la alimentación en Valencia Montessori School, con más 22 años de profesión y un apasionado de la nutrición y alimentación infantil. Autor del blog y canal de YouTube homónimo, es director de la escuela de cocina para adultos The Wholesome Kitchen, creador del proyecto ROOTS: Repostería sin gluten, y un gran conferenciante y divulgador de en congresos de alimentación de toda España.

Sin dientes y a bocados. Juan Llorca. Vergara editorial. ISBN 978-84-16076-88-8

lunes, 5 de noviembre de 2018

Entrevista a Felicia Yap


Hoy comparto con vosotros una entrevista muy especial. La que me ha concedido recientemente la autora de la novela ‘El juego de la memoria’ (Maeva Ediciones). El libro lo reseñé aquí, en Maleta de libros, recientemente. Agradecer desde aquí a Sara Fernández su labor como intérprete y en la traducción, y con afecto a la editorial Maeva. La ciencia de alguna manera es algo que nos une a la autora y a mí. En mi caso, estudié una carrera de ciencias de la salud. Por su parte, Felicia Yap estudió Bioquímica en el Imperial College de Londres antes de doctorarse en Historia en la Universidad de Cambridge. Yap, antes de dedicarse por completo a la escritura, trabajó como bióloga, historiadora, profesora en Cambridge, crítica de teatro y periodista especializada en tecnología.

Esta su primera novela publicada, cuéntenos cómo surgió la idea de escribirla.

   Felicia Yap: La inspiración para El juego de la memoria llegó “en movimiento”. Mi prometido y yo íbamos de camino a un estudio de baile en Cambridge cuando me asaltó una pregunta: ¿cómo resolver un asesinato si solo recuerdas el día de ayer? La idea me intrigó tanto que no pude parar de pensar en ello hasta después de llegar al estudio y empezar a bailar tango (mi baile favorito). Tracé las primeras líneas de la novela en la pista de baile aquella misma noche, entre vueltas y giros. Podría decirse que las vueltas y giros formaron parte de la esencia del libro desde el principio.
Un segundo “y si…” me asaltó aquella noche: ¿Y si la sociedad estuviera dividida entre la gente que solo recuerda un día y la gente capaz de recordar dos? Empecé a preguntarme cómo afectaría gozar de un día extra de memoria a la vida cotidiana de las personas, especialmente en un contexto doméstico. Estas dos preguntas me tenían tan fascinada que empecé a escribir al día siguiente. Quince meses después, tenía un thriller en mis manos.

Entre los grandes temas que aborda la reflexión de esta novela están la discriminación social, la xenofobia y la diferencia de clases. ¿Está de acuerdo?

   Felicia Yap: Estoy de acuerdo en que la novela explora la discriminación social, y la diferencia de clases en particular. En El juego de la memoria, la gente se divide en base a cuánto son capaces de recordar. La gente que recuerda dos días (Duos) ocupan los escalones más altos de la sociedad, en contraste con la gente que solo recuerda un día (Unos). Cuando escribía el libro, cada vez fui más consciente de las diversas divisiones basadas en la memoria que existen en nuestro propio mundo. Quería que la novela fuera un reflejo de esas divisiones. En nuestra sociedad, la gente que, afortunadamente, tiene mejor memoria tiende a llegar más lejos en la vida. Puede que sea más fácil para ellos aprobar exámenes, por ejemplo, porque estos normalmente se basan en memorizar. Si la gente es capaz de recordar los datos correctos, las respuestas para los exámenes, es más probable que obtengan mejores notas y accedan a mejores universidades y mejores puestos de trabajo. La gente con peor memoria a menudo se marchita al final de la escala social (las personas con demencia o Alzheimer, por ejemplos, a menudo acaban internas en instituciones mentales en nuestro propio mundo). Es posible que la dualidad Uno─Duo de El juego de la memoria sea más real de lo que parece…
Uno de los personajes llega a decir: ‘Es imposible decir hasta qué punto influye la vida real en las novelas’. Me gustaría que nos hablara de sus lecturas favoritas, de los autores de ficción que la han llevado a la senda literaria.
   
  Felicia Yap: Me encanta la naturaleza subestimada pero increíblemente precisa de escribir de Kazuo Ishiguro, la belleza visceral de su prosa. Nunca me abandones (Never Let Me Go) fue una gran inspiración para escribir 
El juego de la memoria. La historia de Ishiguro sobre una pareja, consciente todo el tiempo del amor que siente por el otro (pero no lo demuestran hasta la escena final, cuando se abrazan para no abandonarse jamás), es a la vez intensa y desgarradora. Me dio muchas ideas para la historia de amor de El juego de la memoria, sobre las formas en las que podía describir la compleja relación de una pareja que lleva junta veinte años.
   F. Scott Fitzgerald es un absoluto genio creando personajes carismáticos, como en El gran Gatsby. También me inspiró la relación trágica y destructiva de los dos protagonistas principales en Suave es la noche (Tender is the night), y el sacrificio que hace Dick Diver al costear la rehabilitación a su mujer, Nicole. Me ayudó a desarrollar la base del fracturado pero duradero matrimonio de Mark y Claire Evans, en el que hay más devoción por el otro que sacrificio propio. Tres entradas de los diarios en El juego de la memoria (las escenas sobre la playa en Nevis y una enorme olla de estofado de conejo ─que en conjunto ayudan a Mark Henry Evans a descubrir el significado del amor) estaban directamente inspiradas en los últimos capítulos de Suave es la noche.
   Matt Haig es otro de los escritores en los que me fijo. Hace unas observaciones muy precisas sobre la naturaleza y el comportamiento humano en sus libros. Disfruté mucho su obra Los humanos (The Humans), en particular. Leí la serie Millennium de Stieg Larsson cuando era más joven ─es un gran escritor y un as construyendo personajes. Adoro la naturaleza cruda y oscura del thriller nórdico, los paisajes lóbregos y la complejidad moral de sus personajes.

Vemos un guiño a su labor previa como periodista científica, pues va intercalando en el desarrollo argumental de la novela algunos textos a modo de noticias de prensa. ¿Nos comentaría cómo se decidió por utilizar este recurso en su novela?

   Felicia Yap: Quería complementar el universo alternativo de El juego de la memoria de una forma que no pareciera muy didáctica. Fue así como pensé que sería gracioso escribir algunas parodias de noticias sobre este mundo paralelo. Escribir estos artículos me resultó muy fácil, ya que anteriormente había sido periodista científica (solía escribir artículos para la sección de “Ciencia y tecnología” del periódico The Economist). Parte de mi trabajo incluía convertir complejos ensayos académicos (como trabajos de investigación publicados en las revistas académicas Nature o Science) en noticias fáciles de entender por el lector medio. Estos conocimientos de redacción técnica demostraron ser muy útiles cuando empecé a escribir unas cuantas “noticias falsas” para el libro. Todo inspira tu forma de escribir. Todas las experiencias previas son relevantes: nada se malgasta. Todo ello retroalimenta cómo escribes, a veces de la forma más inesperada. También es divertido escribir “noticias falsas” dentro de la ficción, ¡especialmente cuando vivimos rodeados de ellas!

Dado que en El juego de la memoria tiene tanta relevancia el recuerdo, el pasado y la carga de los errores del pasado me gustaría preguntarle por ese deseo tan extendido de poder regresar cada cual a nuestro pasado para cambiar algo. De ser así, ¿cambiaría Ud. algo de su pasado, quizá de su infancia?

   Felicia Yap: Sí, lo haría. Definitivamente. Volvería atrás en el tiempo para asegurarme de no repetir mis errores, especialmente aquellas cosas que aún me persiguen.


El juego de la memoria. Felicia Yap. Maeva Ediciones. ISBN 978-84-171088-0-9

viernes, 2 de noviembre de 2018

El juego de la memoria. Felicia Yap


Me atrae el misterio, el misterio narrativo, me refiero. Quizá por eso entre mis géneros literarios favoritos está el del suspense y el thriler. Con estos mimbres no es de extrañar que acudiera intrigado y expectante a la llamada de ‘El juego de la memoria’ (Maeva Ediciones). El título ya me pareció estimulante, como también ese capítulo cero previo al arranque de la historia. Memoria, recuerdos, odio y un crimen son los ingredientes que se ponen en movimiento en este thriller situado en una sociedad ficticia, distópica. Una sociedad con dos clases sociales bien diferenciadas, los Uno y los Duo. Unos recuerdan solo el día anterior, los Duo, además, el anterior a este. Y ese poder de recordar dos días es el que determina su pertenencia a la clase privilegiada. Una sociedad en la que no está especialmente bien visto el mestizaje, la unión mixta de individuos de ambas clases, como el matrimonio protagonista Claire y Mark Evans. Protagonismo compartido con el enigmático detective Hans Richardson. Este entra en escena y en sus vidas para investigar la aparición del cuerpo de una mujer junto a la orilla de un río. Una investigación contrarreloj y una sucesión de enigmas que se irán resolviendo alrededor de ese poder que es el recuerdo, la capacidad de saber elegir qué recuerdos son importantes y cuales no si solo podemos retener los del día anterior. He celebrado el cambio de punto de vista de los capítulos al alternarse la voz narrativa entre los personajes. De esta manera el juego es del lector a la hora de componer las piezas de este puzzle, el de ir averiguando quién dice la verdad. 

Felicia Yap
Salvando muchísimo las distancias me ha evocado, insisto ligeramente, a ‘El cuento de la criada’ de Margaret Atwood por ese enfoque distópico y filosófico sobre la relevancia que le damos en nuestro entorno a valores como el de la tolerancia o el de la igualdad entre clases.

Felicia Yap (Kuala Lumpur, 1980) estudió Bioquímica en el Imperial College de Londres e hizo un doctorado en Historia en la Universidad de Cambridge. Trabajó como bióloga, historiadora, profesora en Cambridge, crítica de teatro y periodista especializada en tecnología antes de dedicarse por completo a la escritura. ‘El juego de la memoria’ es su primera novela publicada ya en quince países.