miércoles, 29 de mayo de 2019

Entrevista a Elia Giner


Tuve la suerte de conocer a Elia Giner recientemente. Vino de promoción a la Feria del Libro de Valencia con su novela ‘Reflejos’ (Ed. Versatil). Para quien no conozca a esta autora, decir que su afición por la lectura empezó desde que era pequeña. Lectora voraz desde que tuvo su primer contacto con un libro, su infancia y su adolescencia han estado llenas de libros. Comenzó a escribir su primera novela, la primera entrega de una Trilogía fantástica titulada “Rey Negro, mariposa blanca”, en 2010. Tras los dos primeros volúmenes de esta Trilogía, escribió “Reflejos”. Agradecido a Elia y a la editorial Versatil, comparto la entrevista que me concedió acerca de esta novela. 

La protagonista de Reflejos es Carla Vinci, una joven de quince años que se ve de repente inmersa en el divorcio de sus padres con un traslado ‘forzoso’ a otra ciudad. La persona menos coqueta ‘que puedas echarte a la cara’, según se define ella misma, ya que no suele pintarse ni arreglarse. Sumémosle que dice ser, además, ‘la persona menos interesada en ropa del mundo mundial’. Háblanos de este personaje ya que parece romper el manido estereotipo de la adolescente rebelde volcada en su imagen y el teléfono móvil. 

Carla es una chica muy tímida y con bastantes inseguridades. En general, le gusta pasar desapercibida, por eso tampoco es muy coqueta… ¿Qué por qué la creé así? Porque quería una protagonista imperfecta, una especie de “antiheroína”. Y, aunque en el tema de la coquetería y la obsesión por la imagen, Carla pueda romper el estereotipo actual, hay muchos otros rasgos de su carácter con los que resulta imposible no empatizar… ¿Quién, a los 15 años, no se ha sentido inseguro? ¿Quién, en la adolescencia, no ha tenido miedo a ser diferente, a no encajar?

Desde hace siglos, en distintas culturas, leemos que los espejos ‘han estado ligados a lo oculto y lo esotérico’. Me ha llamado la atención, por ejemplo, esa leyenda urbana, la de Verónica, pues también la oí a la edad de Carla. Háblanos de ello en el contexto de la novela y de lo que a buen seguro habrán escuchado los inquietos lectores de esta novela

Es cierto que, desde siempre, se han contado historias misteriosas que han tenido como protagonistas a los espejos. La de la Verónica, la de los espejos como puertas al mundo de los muertos u otras dimensiones… Todos las hemos oído, ¿verdad? Pues bien, estas leyendas urbanas me han ayudado a dar verosimilitud a la parte fantástica de la novela, han hecho que me sea más fácil conseguir que fantasía y realidad empasten perfectamente. Y creo que esto ha sido crucial a la hora de que los lectores puedan meterse en la piel de Carla desde las primeras páginas. 

Lo de mentir cada vez me sale mejor’, llegamos a leer en un momento determinado de Carla. La verdad y la mentira es algo que también solemos asociar con la edad, aprendemos a mentir en algún momento más allá de aquello de que los niños y los borrachos siempre dicen la verdad para retomar ese buen hábito con la madurez. ¿Quizá la adolescencia se presta a descubrir el valor de la verdad y la mentira como metáfora de este espejo protagonista de tu novela? 

Es cierto que Carla miente mucho en la novela, sobre todo a su madre, ¡ja,ja! En su disculpa, hay que decir que, en ocasiones, no tiene alternativa: bien le es imposible decir la verdad porque nadie la creería, bien se trata de mentiras piadosas para no preocupar a su familia. Tendemos a pensar que las mentiras son siempre malas, pero no todas lo son. A veces son necesarias.

Reflejos’. Elia Giner. (Ed. Versatil).

Puedes leer aquí otras interesantes preguntas de la entrevista




2 comentarios:

  1. No conocía a la autora así que gracias por esta entrevista. Interesante su libro.
    Besotes!!!

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    1. Gracias Margari, si lo lees ya sabes que esperamos tus comentarios. Un saludo.

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