martes, 16 de septiembre de 2025

Parecido a un asesinato. Entrevista a Juan Bolea

Me concedió estos días una entrevista el escritor gaditano, residente en Zaragoza, Juan Bolea. Entre sus más de veinte novelas publicadas, le pregunté por un inquietante thriller que en breve podrá verse en la gran pantalla adaptada por el director ganador del Goya al mejor guion por En la ciudad sin límites. Antonio Hernández. Abajo os dejo algunos detalles.


P.: Parecido a un asesinato es un thriller, pero me arriesgo a decir que es una obra que se aleja del tipismo del género. No comienza con un crimen o similar. La lectura es espiral, morosa y va madurando como caer en una tela de araña, urdida entre bastidores. ¿Nos comenta un poco las bambalinas argumentales de su novela?

R.: Las bambalinas argumentales de la novela tienen mucho que ver con el género del libro, que es una novela de suspense, o thriller psicológico. Se trata de un argumento milimétrico, cuidadosamente desarrollado para que el lector vaya asumiendo y asimilando el conflicto que se le expone, sin adelantar, ni siquiera insinuar ninguno de los giros que irán acercando la trama a su final en esa “espiral” que usted acertadamente define.

P.: Hay mucho de thriller psicológico en esta novela, lo cual hará las delicias de las y los fans del género. En ese subyugante laberinto de nuestra mente parece que se esconden aún más misterios que en el espacio exterior. Y una de las maneras de viajar a ella es, por ejemplo, con la hipnosis. ¿Qué opinión le merece esta técnica clínica a la vista de los seguidores y detractores actuales?

R.: La hipnosis representa en la trama un recurso escénico que aporta plasticidad y misterio. En mi opinión, es una técnica perfectamente válida tanto en la práctica clínica como prueba judicial.

P.: Gijón se asoma como un escenario quizá algo perturbador, latente y aditamento de la propia trama. En ocasiones, es la ciudad, el paisaje, el que nos sumerge en las historias, aunque le preguntaría por los detalles, por los verdaderos rincones asturianos en Parecido a un asesinato... y su intención narrativa.

R.: Gijón es un buen escenario para esta novela. Una ciudad real, activa, con mar, con sabor y color… Los barrios rurales, por ejemplo, donde vive la protagonistas, son ricos en casas buenas, ajardinadas, incluso con hórreos. Asimismo los paisajes que rodean a Gijón, en los muy cercanos Picos de Europa, serán fundamentales para los espacios y efectos narrativos de “Parecido a un asesinato”.

P.: Como última pregunta, voy a preguntarle por las secuoyas, aunque puede hablarnos de los cipreses, por un pasaje de la novela. Soy un enamorado de Cantabria y de Santander, así que busqué en internet acerca de Jacinto del Piélago y Ponce de León. No sé si podemos comentar algo, al respecto, a las y los lectores para animarles un poco más a curiosear Parecido a un asesinato.

R.: Ah, las secuoyas… También son muy inspiradoras, es verdad. Hay un bosque de ellas, cerca de Cabezón de la Sal, entre cuyos troncos me pierdo de vez en cuando…


Juan Bolea (Cádiz, 1959) es un escritor y periodista español residente en Zaragoza, licenciado en Geografía e Historia. Es autor de más de veinte novelas. Varias —La melancolía de los hombres pájaro, El síndrome de Jerusalén, Orquídeas negras— premiadas. Otras como: Pálido monstruo, Parecido a un asesinato o La mariposa de obsidiana han sido adaptadas al cine o al teatro. Cuando no escribe, viaja, urde antologías, proyectos, imparte talleres literarios o dirige eventos culturales como los festivales Aragón Negro y Panamá Negro. En el 2018 recibió el Premio de las Letras Aragonesas. La serie protagonizada por el detective Florián Falomir se inició con Los viejos seductores siempre mienten (2018) y ha continuado con Sangre de liebre (2019), La noche azul (2020) y El síndrome de Jerusalén (2021)

Blanca Suárez y Eduardo Noriega protagonizarán la adaptación cinematográfica de la novela homónima de Juan Bolea película dirigida por Antonio Hernández que se estrenará en octubre de 2025


Parecido a un asesinato. Juan Bolea. Alrevés editorial

lunes, 1 de septiembre de 2025

Gris, más bien, plomo. Entrevista a Elga Reátegui

De regreso tras las merecidas vacaciones, es un verdadero honor hacerlo con esta entrevista. Elga Reátegui y yo nos conocimos hace años, por un libro suyo, además. El tiempo lo podemos contar por libros publicados, por anécdotas y por recuerdos en común. Agradecido, solo queda dejaros aquí esta entrevista y mi recomendación para que os acerquéis a “Gris, más bien, plomo" (La Rueca).


P.: Si hubiera dos clases de novela, de trama y de personaje, creo que coincidiríamos en que "Gris, más bien, plomo", es de personaje: el de Chela Vargas en el centro de la historia. Y si te preguntase cinco rasgos que definen a la protagonista de tu novela, ¿cuáles elegirías y por qué?

R.: El lector posee plena facultad en cuanto a cómo quiere ver o enfocar el contenido de la historia, en eso no tengo el control, obviamente. Sin embargo, lo que sí está en mis manos es, quizá, usar a mi personaje para abordar temas que para mí son de vital importancia o que merecen un mayor foco de atención. En cuanto a Chela Vargas, debo admitir que es un personaje complejo y polémico. Al que puedes detestar de comienzo a fin o prodigarle algo compresión paulatinamente, pero sin llegar a empatizar con ella jamás. 

Sobre sus rasgos de personalidad, Chela Vargas se acepta tal cual es, está comprometida consigo, ama su libertad, sabe lo que quiere y acepta sus limitaciones. Me quedo con su capacidad de quererse, pese a ser consciente de sus egoísmos. No se juzga ni claudica. Es así y ya está. 

P.: Junto a Chela orbitan otros personajes y eso que Chela es brava y muy independiente. No quiero dejar pasar la oportunidad de que nos cuentes ese delicado triángulo de Chela con su primo Samir y con su amor, Nuria.

R.: No creo que exista ese triángulo amoroso tal como lo enfocas. Descarto que sea así. Sin embargo, acepto que existe un fuerte vínculo afectivo de modo individual, es decir, Chela respecto a Samir y viceversa,  y, algo similar, también ocurre con Nuria. Además del cariño, que es patente, hay mucha necesidad por parte de ellos. Tal vez, ni sea afecto, sino apego lo que sostiene sus relaciones. Samir y Nuria se hallan en plena búsqueda de alguien o algo que los saque su vacío, que les indique que son indispensables en la vida del otro, en este caso, de Chela. Es ella la que les prodiga ese nutiente, por tanto, alimenta su alicaída autoestima y da sentido a sus existencias. 

P.: En cierta ocasión comentamos que no has caído, como algunos autores, en darle excesivo protagonismo a las descripciones paisajísticas, a los decorados profundos exteriores. Y, sin embargo, Lima está muy presente con sus calles, sus rincones, hospitales incluidos, o  el cementerio de perros de  Huachipa. Háblanos de esa Lima y de ese no coprotagonismo secundario de una ciudad que conoces bien.

R.: Nunca me he prodigado en descripciones, por tanto, tampoco he incurrido en el error de caer en excesos en pos de hacer los escenarios más reales. Hubiese sido un despropósito que el paisaje devorara la historia. No caigo en ese tipo de tentaciones. Doy lo justo y lo necesario para que se den una idea del entorno. 

Mi Lima, pese a sus cambios urbanísticos y la inmigración de los últimos tiempos, en esencia sigue siendo y, probablemente, continuará siendo la misma. Es una dama sensible, ingeniosa, huachafa, coqueta y muy nostálgica. Quien conozca Lima por haber nacido allí o haberla visitado alguna vez resaltará su casi perenne cielo de tono “panza de burro", ese gris de todos los matices que nos acompaña durante gran parte del año. Dicen los entendidos que esa condición climática marca o influye en el alma del limeño tornándolo nostálgico hasta algo tristón. No lo desmiento, tal vez, sea cierto. 

P.: Por alguna razón, propia o ajena, me ha venido a la mente el personaje griego de Penélope. Diferencias aparte, veo que ambas tejen y destejen hilos, con recuerdos, con personajes, con deseos y, ambas, en el fondo, esperan con paciente impaciencia. Lo hilvano con una pregunta delicada, si crees que van a empatizar más con esta historia los lectores, pero sobre todo las lectoras, que hayan pasado por el mal trago de Chela.

R.: El cáncer. La historia se desarrolla a partir de la aparición de dicha enfermedad que sorprende a Chela Vargas lanzándola a unas sesiones de quimio que enfrenta como puede. Y todo ocurre mientras ella atraviesa ese duro proceso, llena de miedo, incertidumbre y un transcurrir de tiempo en en el no que sabe qué esperar. 

La novela está basada en un hecho real. Un buen porcentaje de lo que cuenta la historia ocurrió en verdad. Es la experiencia de mi madre y de lo que yo viví con ella durante ese período. 

P.: Personalmente creo que no es casual que Chela Vargas sea periodista, que trabaje en un medio de comunicación. Algo de Chela hay en ti o al revés. Quizá te ha servido para contar, entre la ficción, experiencias o recuerdos personales. Nada nuevo, me temo, para quienes somos asiduos a tu narrativa novelada. ¿He acertado?

R.: Sí, a veces las historias parten de algún suceso vivido durante el desempeño de mi carrera periodística. Aproveché un par recuerdos de mi paso por algunos medios de comunicación para retratar el paisaje humano, los quehaceres propios y el ambiente habitual en dichos hábitats. 

La incertidumbre de la venta del canal y los despidos arbitrarios con listas que salían a diario fueron sucesos que vivieron mis compañeros, en una televisora, a finales de la década de los `80, tal como le ocurre a Chela Vargas. Yo me marché antes, no estaba dispuesta a padecer esa tortura.  

P.: Si antes comentaba que no has dado un gran rol coprotagonista a la ciudad de Lima, me atrevo a decir que sí se lo has otorgado al amor en "Gris, más bien, plomo". El amor casi con mayúsculas, desde el amor a uno mismo, en forma de autoconocimiento y autoconcepto, pasando por el amor a los demás, ya romántico ya de parentesco. De hecho, creo que lo que salva a muchos de tus personajes de sufrir un fin injusto es precisamente el amor, en una direción o bidireccional. Por si quieres hablarnos de ello, no nos olvidemos de Natusha, ¿sí?

R.: No es novedad afirmar que siempre buscas a alguien a quien amar. En cuanto a Chela, ella elige amarse a sí misma, anteponiéndose a los suyos, y es válido, por supuesto. Aunque también, vemos que depositó gran parte de su cariño en Natusha, su perrita, a la que, según ella, quiso de veras y sin expectativas. 

El amor es capaz de realizar milagros internos y externos, pero no se halla fuera, debes encontrarlo dentro de ti, reconocerlo y vivir de acuerdo a sus dictados. El amor no es ciego ni tonto, dejemos de subestirmalo o confundirlo. El amor es sabio, justo e incondicional. Pero, lamentablemente, hoy en día el romanticismo cruel, grosero y egoísta lo suplanta en las relaciones humanas produciendo sufrimientos inútiles y vacíos existenciales. 


Elga Reátegui nació en Lima (Perú) y desde hace años reside en Valencia (España). Es periodista y escritora. Laboró en diversos medios de comunicación de la capital peruana. Produce y conduce dos espacios literarios: VíaLibros (reseñas) y Reunidos (entrevistas). También es creadora  del programa Háblame de tu libro, del autor al lector. Todos se difunden en su revista digital La ardilla literaria, en YouTube y en las redes sociales. Ha publicado nueve poemarios y cinco novelas, entre los que destacan En mi piel,  El vals de la gata, A este lado y al otro e Y te diste la media vuelta. En 2020 obtuvo un International Latino Book Awards (primer puesto) por su libro La fugacidad del color, en la categoría Best Collection of Short Stories (Estados Unidos). En junio de 2022 su libro Tari, la tortuga que vino del espacio (Lastura 2021), su primer libro infantil, obtuvo una mención honorífica en los International Latino Books Awards (categoría Best Illustrated Children's Book). Es miembro de la Directiva la Asociación Escritores y Críticos Literarios de Valencia (CLAVE) y la Comisión de Escritoras PEN Club Internacional del Perú. Está afiliada a la Unión de Periodistas Valencianos y a la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE). Administra el blog de entrevistas La ardilla literaria que publica reseñas y entrevistas de colaboradores. Asimismo es fundadora del club de lectura homónimo a la revista, en la ciudad de Valencia, donde realizan talleres de escritura y presentaciones de libros, entre otras actividades.

Gris, más bien, plomo. Elga Reátegui. Editorial La Rueca.

https://elgareategui.com/

lunes, 30 de junio de 2025

Hongos poderosos. Federico di Vita

Del libro que traigo esta semana, Hongos poderosos (Oberón), de Federico di Vita, lo primero que diré es que es un acercamiento al fascinante mundo de los hongos. Unos organismos, los hongos, tan característicos que tienen un reino para ellos solos (recordemos que a su reino se le denomina Fungi, e incluye también, por ejemplo, los mohos y las levaduras). 

Lo segundo que añadiré es que es un libro bellamente ilustrado, en este caso, por Florencia Díaz. Por descontado, hay una sección al final del libro con fotografías para hacer más fácil su reconocimiento. Algo que también es reseñable es la estructura del libro. 

Hongos poderosos se divide en varias secciones pues de los tres millones de especies estimadas en nuestro planeta, se cree que solo estamos familiarizados con el seis por cien. Tenemos tanto por aprender de estos organismos... Decía que hay seis partes en el libro; una sección dedicada a las setas exquisitas, es decir, a las comestibles y bien apreciadas en la gastronomía. Una sección de setas alucinógenas, un tema que Di Vita conoce bien como leemos en su biografía. La tercera sección se centra en las setas venenosas, esas que han despertado el interés del hombre desde la antigüedad, sin duda. Junto a las anteriores, cabía añadir un más que interesante capítulo a las setas medicinales, porque su uso terapéutico es conocido desde hace miles de años. 

Además de una sección dedicada a la micorrización, Di Vita nos presenta una dedicada a los hongos extraños (o que hacen cosas increíbles). Como increíble es leer en la Introducción que el organismos vivo más grande del planeta es un hongo que ocupa... ¡890 hectáreas! Podría extenderme dando ejemplos sobre las especies que aparecen en Hongos poderosos, pero como la brevedad es otra de las consignas de su autor, solo añadiré que la lectura de este libro va a conseguir dos cosas, estoy convencido. 

La primera, que no veamos igual a los hongos en general y a las setas en particular. Y, la segunda, nos abrirá el interés para seguir indagando sobre ellos, ya sea como remedio casero para dolencias, como aperitivo gourmet en la mesa o como reflexión acerca de quienes probablemente fueron la razón de que la vida como la conocemos se la debamos a ellos, que estéis leyendo esto, ahora, se debe en parte a hongos que vivieron hace miles de años y con la evolución transformaron el planeta... y quizás lo sigan haciendo en estos momentos. ¿A dónde nos llevarán?


Federico di Vita nació en Roma, vive en la Toscana y escribe sobre comida, psicodelia y cultura en varias revistas. Es autor de varios libros y editor del libro colectivo 'La apuesta psicodélica' ('La scommessa psichedelica') 2020. Desde enero de 2021 presenta 'Psychedelic Enlightenment', un podcast dedicado íntegramente a la psicodelia. 


 Hongos poderosos. Federico di Vita. Oberón libros

lunes, 23 de junio de 2025

La regeneracion de Dios Entrevista a Ricardo Guadalupe

Junio no solo nos trae el calor, el cambio de estación, sino también, una noche muy especial: la noche de San Juan. Llena de ritos, misterios y deseos, es a mi modo de ver una tradición que aúna lo místico, lo pagano y lo religioso. Incluso lo purificador y lo iniciático, ingredientes todos de algún modo presentes en la novela de mi entrevistado. La regeneración de Dios (Gusanillo), de Ricardo Guadalupe es una historia aparentemente juvenil, pero rica en matices, en valores humanos como nos desvela en esta entrevista. Espero que os guste.



P.: El protagonista de La regeneración de Dios es Abel Soca, alguien que según leemos: "fantaseaba con la idea de que en realidad era adoptado y que por razones desconocidas y secretas le esperaba un destino de héroe." Esa idea me sirve para preguntarte por este personaje en el contexto de la trama.

R.: Abel, el protagonista, es un joven sobreprotegido e inadaptado. No tiene confianza en sí mismo, básicamente porque no se quiere. Y ni mucho menos sabe cuál es su lugar en el mundo. Pero ante una serie de acontecimientos extraordinarios e inexplicables, no tendrá más remedio que tomar decisiones a marchas forzadas. Para ello necesitará empezar por conocerse a sí mismo y pasará por experiencias que le ayudarán a entender mejor el amor, la amistad, la noche e incluso la intemperie. 

P.: Uno de los conceptos que creo que mueven la historia es el del bien y el mal. Un poco como el Yin y el Yan, lo vemos también en forma simbólica con parejas de personajes. Me refiero a Abel y Sara, a Fronte y Braxo o a Martín y Román, por ejemplo. Háblanos de ese simbolismo buscado en personajes y elementos.

R.: Abel solo había tenido una pareja que era su propia sombra. Una parte oscura que lo tentaba hacia la agresividad. Con Sara encuentra un equilibrio que hay que cuidar, porque aprende que no se mantiene por sí solo. Fronte y Braxo, dos seres de otro mundo que representan la sabiduría y la fuerza, le guían en el camino. Y Martín y Román, siendo dos policías de este mundo, representan dos maneras muy diferentes de comportarse con otro ser humano.

P.: Quiero pensar que esta novela tiene una banda sonora marcada y singularísma. Se "escuchan" tanto a solistas como a grupos, nacionales e internacionales. Pondré algunos ejemplos, aunque prefiero que nos comentes al respecto. David Bowie, Mercedes Ferrer, Radiohead, Antonio Vega, Gun`n Roses...

R.: Sí, en esta novela volqué mis referentes culturales. Hay letras de canciones, diálogos de películas y citas literarias, tanto en los encabezados de los capítulos como dentro de la narración. Y siempre para reforzar lo que estoy contando. También he de decir que a la hora de escribir procuré encadenar las frases de manera armónica para dotarlas de un ritmo interno que facilitara su lectura. Me gusta que el texto respete el sentido del oído. Además, Sara, el amor de Abel, es estudiante de piano.

P.: En algunas novelas, el decorado es casi otro personaje más. En La regeneración de Dios aun no siendo así, creo, ubicas esta historia en Madrid y, en algunas ocasiones, en la sierra de Guadarrama (todo y que también nos llevas fuera de España). ¿Por qué estas localizaciones para contar esta historia con tanto calado humano y toques de ciencia ficción?

R.: Es una historia de ciencia-ficción urbana y sí, Madrid es casi otro personaje más. Arranca en el Rastro, donde el guerrero elige a Abel entre la multitud. Muestra la naturaleza de la sierra de Guadarrama, donde el protagonista entrena cuerpo y mente con Braxo y Fronte. Y en definitiva recorre con diferentes personajes cada edificio, local o calle de Madrid que ha significado algo para mí: el Berlín Café con Martín, el Rincón Musical con Sara o la Cuesta de la Vega con Simón, por ejemplo.

P.: Aprovecho la pregunta anterior para preguntarte por un detalle curioso, al menos para mí, cuando en un pasaje se habla del origen de la vida. Se postula la teoría de la panspermia dirigida, si no recuerdo mal. No abriré el debate, me contento con que nos hables de la parte más técnica, por así decirlo, por el puntito de reflexión que sin duda has querido volcar en la historia.

R.: Para documentarme sobre el origen de la vida en la Tierra me apoyé en una amiga astrónoma, Judith Palacios, quien me reveló el protagonismo que habían tenido los cometas en ese origen, por los compuestos químicos precursores de vida que transportan y que cayeron en grandes cantidades desde los primeros momentos de la formación de este planeta. Esta hipótesis se llama panspermia. Y encaja muy bien con la idea panteísta que planteo en la novela sobre un gran Todo del que formamos parte, un Universo al que llamo Dios.

P.: El amor tiene un papel creo que crucial en La regeneración de Dios, singularizado en la pareja Abel y Sara, aunque creo que como hay muchos tipos de amor, también se extiende a ese que a menudo nos exige un sacrificio por los demás, desinteresado. ¿Nos hablas de ello?

R.: Sí, en la novela hablo por un lado del amor de pareja, habitualmente tratado de forma superficial en las canciones y sobre el que recuerdo que empecé a profundizar con la lectura de El arte de amar, del psicólogo Erich Fromm. También hay sexo, otro tema del que hay que hablar, para que la pornografía no sea lo único a lo que puedan recurrir los jóvenes. Y también pongo en valor el papel del amor en el proceso de mejora y perfección de la Naturaleza. Entendido aquí el amor como la interacción solidaria que se ha dado desde el principio de los tiempos entre diferentes elementos de la Naturaleza, a nivel micro y macro.

P.: Por último, de un tropel de frases por las que podría preguntarte, por no abusar, me quedo con esta por si quieres comentarla. Es esa donde al hilo de la felicidad, sobre dónde radica, leemos que "dura tan poco que uno podría pensar que la auténtica felicidad está en lo que creemos que es la antesala de la felicidad".

R.: Bueno, ya lo decía Kavafis en su poema Ítaca, muchas veces es más importante el camino que llegar. En mi caso, esta novela siempre fue mi gran objetivo, y para alcanzarlo recorrí un largo camino de formación que incluyó la publicación de tres libros. El primero sobre recursos literarios, para aprenderlos. El segundo de aforismos, para dotar de frases a los personajes y a las ideas que estos reflejarían en la novela. El tercero de relatos cortos, para practicar el arte de la narración. Y además, pasé por numerosas experiencias enriquecedoras. Fui persona-libro, colaborador en un programa de radio, redactor de discursos políticos, profesor de escritura creativa y hasta patafísico. Sí, la ilusión por llegar es un motor potentísimo y puede generar auténtica felicidad.


Ricardo Guadalupe (Madrid, 1974). En 2005 gana con “El rizo de Ventura” el I concurso literario del programa El planeta de los libros, de Radio Círculo. En 2009 deja su trabajo para emprender diversos proyectos literarios. El primero fue Palabras literarias (2010), fruto de un año de colaboración en el programa El planeta de los libros, de Radio Círculo. Se traslada a Málaga, donde imparte el taller de escritura creativa «Las palabras del escritor». En Granada publica el ensayo De la oscuridad a la luz a través de la escritura. Y en Valencia  forma el grupo de narradores orales Personas-libro de Valencia, dentro del Proyecto Fahrenheit 451. Antes de volver a Madrid, publica el libro de aforismos Frases en el muro (2012) y un año después Relatos con abrelatas (2013). La regeneración de Dios (2025) es su primera novela.

La regeneración de Dios. Ricardo Guadalupe. Editorial Gusanillo.