Lo primero que llamó mi atención de este
libro fue su título. ‘Presento, luego existo’. Obviamente, me
recordó de inmediato a esa locución latina: Cogito
ergo sum atribuida a René
Descartes. Un verdadero planteamiento filosófico que Miguel Ángel
Guisado, el autor de Presento, luego existo (Ed. Gestión 2000) lleva
a la práctica desde el enfoque de las presentaciones.
Lo segundo que me llamó la atención fue
la propia portada, pues destaca un elemento de color rojo sobre otros
en negro a modo de metáfora que también se aprecia en el interior
del libro. Porque Guisado nos regala en esta obra un auténtico
manual de cabecera para quienes tengan que enfrentarse a una
presentación de manera exitosa. El lenguaje es claro, ágil, con
ejemplos y un delicioso sentido del humor.
Guisado repasa los puntos clave de una
buena presentación
con una declaración de principios indudable, la de qué NO es una
presentación. Y no es una simple declamación apresurada de una
serie de datos al tiempo que uno señala con más o menos pericia una
pantalla en una sala en penumbra. Es muchísimo más, sin duda. Así
nos lo muestra desde su experiencia, como un acto de comunicación a
menudo fundamental para el prestigio profesional del presentador.
Otra de las cuestiones que me planteé
mientras leía ‘Presento, luego existo’ era si los consejos que
iba a encontrar tendrían aplicación fuera del ámbito laboral. Es
decir, si además de repasarse en él todos los aspectos esenciales
para llevar a cabo una presentación exitosa, podía importar
aquellos a la vida cotidiana. Y la respuesta es que ya en el seno de
una organización, ya frente a otras empresas, en congresos, o en las
posibles intervenciones públicas, este libro ameno --y casi
conversacional--, promueve un cambio de mentalidad respecto al enorme
potencial de las presentaciones.
La palabra clave para Guisado es la
persuasión. Es decir, que debemos tener claro lo que queremos
conseguir con la presentación y persuadir a nuestra audiencia
mediante la credibilidad, los datos y las acciones presentadas, pero
también a través de la emoción que se sepa comunicar. Ahí está
la clave de la persuasión, en lo que Guisado llama el ADN de las
presentaciones: la suma de Actuación, Diseño y Narrativa.
Espoleado por este planteamiento,
agradecido por lo aprendido con ‘Presento, luego existo’, me puse
en contacto con el autor para entrevistarle. En breve compartiré la
entrevista aquí.
Miguel
Ángel Guisado es ingeniero
superior industrial y diplomado en Alta Dirección de Empresas.
Actualmente es asesor de Comunicación Directiva en Habilor, empresa
que fundó para formar y asesorar a profesionales en sus
presentaciones e intervenciones públicas. Es, asimismo,
conferenciante y profesor visitante de habilidades de presentación y
comunicación directiva en varias escuelas de negocios.
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