Con esta entrevista os deseo felices fiestas, ya que mañana es
Nochebuena.
He elegido esta en concreto porque tiene un
valor especial para mí, se la hice al escritor bilbaíno Fernando Marías, tras
haber obtenido el premio Biblioteca Breve de Novela 2015 por ‘La isla del padre’
(Seix Barral, 2015). Concretamente en la Feria del libro de Valencia sentándome
con él en la caseta donde firmaba ejemplares de su libro y de una manera casi
espontánea por mi parte pues ese día no tenía previsto ir de ‘periodista’ o
turronero como les apodan a los no periodistas en Perú, segú mi amiga Elga (un saludo).
Para quienes no conozcan a Fernando Marías
decir que es novelista y cineasta, vive en Madrid, y es autor de las novelas ‘La
luz prodigiosa’ (premio Ciudad de Barbastro 1991), ‘Esta noche moriré’, ‘El
Niño de los coroneles’ (Premio Nadal 2001), ‘La mujer de las alas grises’ e ‘Invasor’.
Ha escrito el guión de la película ‘La luz prodigiosa’, adaptación al cine de
su novela homónima, que recibió numerosos premios internacionales, así como
varias nominaciones a los premios Goya.
‘La isla del padre’ es un libro en que
rinde un homenaje a la literatura y al cine, ¿no es cierto?
Sí, es un
homenaje, a partir de la figura de mi padre que yo empiezo a narrar, a explicar,
se convierte así en una novela en la que yo soy el protagonista, hay algo de
novela de aventuras en este libro; es un homenaje a la literatura y sobre todo
al cine, porque el cine salvó mi vida cuando era joven. Creo que lo puedo decir
casi literalmente, yo vivía en el Bilbao en los años franquistas, en una ciudad
gris, oscura, contaminada, franquista en manos de la iglesia franquista de la
época… El cine surgió como un rectángulo blanco en la pantalla como un espacio
de salvación, me metía literalmente en la película, era una especie de Alicia en el país de las maravillas, me metía
en la pantalla y ahí era feliz y ahí soñaba con la idea de que otros mundos
eran posibles, por eso he querido rendirle un homenaje y todo eso sale en este
libro, la idea de que la fantasía es esencial para que la vida humana se
desarrolle.
Viendo que hay una parte muy íntima, muy
personal en el libro, ¿hasta qué punto a la hora de escribirlo, a la hora de
ficcionar a uno le cuesta más que si tuviera que inventar un universo, para
separar, para poder verlo en perspectiva, que uno no termine contándole
batallitas al lector?
Yo creo que
aunque yo me conozca mi historia y me la conozca muy bien, lo realmente
difícil, lo que convierte la escritura de este libro en la
escritura de ficción, es que todos estos hechos reales de mi vida hay que
encontrar el tono adecuado, la forma adecuada para contarlos y convertidos en
algo que el lector lea como un libro, como una novela, como un libro que le
interese, ¿no? Yo con eso sí que he tenido que hacer un trabajo de autor de
ficción, armando, elaborando una novela, encontrando el tono, las palabras
precisas… Ha sido más complicado en este sentido que hacer una novela de
ficción. Primero tienes que asumir que vas a contar la verdad y que lo vas a
contar sin pudor –fueron las dos primeras premisas que yo me hice a mí mismo–,
y luego te das cuenta de que no lo puedes contar de cualquier manera, encontrar
el tono para que sea atractivo, para que emocione al lector eso ha sido muy complicado.
Los lectores no sé qué opinarán pero al
jurado del Premio premio Biblioteca Breve les ha gustado, enhorabuena. Pregunta
casi obligada, ¿qué supone para usted el premio y qué para el libro?
Yo creo que primero,
este premio es estupendo y buenísimo, para cualquier libro y cualquier escritor
sería estupendo, pero en este acaso hay un añadido especial, este libro lo
pensé durante años y lo escribí en el último año, durante 2014. Es un libro muy
especial porque habla de la muerte de mi padre, es un libro íntimo, una
conversación con él, un libro que yo todo el tiempo que lo escribí aunque, no
fue un tema que me preocupaba, realmente pensaba que no lo iba a leer nadie,
pensaba que podía ocurrir que no lo leyese nadie.
Curiosamente
parece que ha ocurrido justo lo contrario, es decir, el premio parece que ha
abierto una espita según la cual los lectores que no me conocen de nada
comienzan a leerlo; porque sí que lo habían leído gente cercana a mí, lógicamente
mis amigos, mi familia, pero gente que no me conoce se acerca conmovida por el
libro. Eso al final son las claves de un éxito que todavía estoy tratando de
definir, ¿lo habré hecho tan íntimo, tan para mí que esté resultado a los
lectores que se acercan a él? Creo que ese es el verdadero gran reto.
Y en estos tiempos de crisis, ¿un premio
ayuda?
Claro, porque
el libro se difunde, se ve, se promociona mucho, atrae los medios. Yo creo que
hay cosas que están claras, los premios ayudan mucho a los libros y creo que un
premio de estas características, y haber obtenido un premio como el de la
Biblioteca Breve, ¿qué más se puede pedir?
Muchas gracias y mucha suerte, Fernando
.
Por Ginés J. Vera.
Sinopsis
A mitad de camino entre la memor
FELICES FIESTAS
Literatura y cine unidas... Tendré que empezar a buscar este libro. Buenísima entrevista, como siempre!
ResponderEliminarBesotes y felices fiestas!!!
Muchas gracias Margari. felices fiestas para ti también.
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