En esta novela, hay dos claros protagonistas alrededor del obrador de la panadería del pequeño pueblo donde viven. Sofía era una bailarina del ballet, pero habrá de dar un giro a su vida laboral, una vez supere el vértigo del final de un ciclo, algo no siempre fácil. Así, casi de casualidad, conocerá al panadero Guiacomo Botura. Un calabrés de 53 años con más de la mitad viviendo en Alemania. Él parece conocer muy bien el oficio, al punto de transmitirle a Sofía ese gran secreto: si sabes hacer buen pan has entendido qué ingredientes necesitas para vivir una vida feliz. Henn nos sumerge en esta novela con el corazón y los sentidos: el olor a pan recién hecho, el color de la corteza, el sabor de su masa aún caliente... La felicidad es como hacer pan o viceversa, eso es lo que irá aprendiendo Sofía, aunque no será fácil, porque en ocasiones, para aprender hay que desaprender. ¿Hay algo menos parecido entre bailar ballet y trabajar como panadera? Quizás no solo Sofía sino los lectores de El panadero que horneaba historias se sorprenderán de la respuesta. Como también que cada pan tiene su personalidad y como los libros hay un pan para cada momento...
Paso a paso, Henn va amasando los capítulos de esta historia que nos llega tierna y dulce, lista para paladearla esbozando una sonrisa al asentir con la emotiva filosofía de Giacomo o sus guiños a las canciones de su admirado Domenico Modugno.
Carsten Henn (Colonia, 1973) trabaja como escritor y periodista especializado en enología y como crítico gastronómico. Es autor de varios libros de no ficción y de tres exitosas series de novela negra. El hombre que paseaba con libros (Maeva, 2022) supuso el inicio de una prometedora carrera internacional.
El panadero que horneaba historias. Carsten Henn. Maeva ediciones.
Creo que podría disfrutar mucho con esta historia. Tomo buena nota.
ResponderEliminarBesotes!!!
El pan nuestro de cada día, como los libros, la lectura... mejor a diario. Un saludo, Margari.
Eliminar