Curiosamente
me confiesa que el empujón para ponerse a escribir esta novela se lo dio leer
otra, «’El malentendido’, de Irene Nemirosky», me dice cuando le pregunto, «que
también aparece en esta novela». Novela que se leyó « hace un par de años y
cuando terminé me dije, qué pena no habérmela leído antes, porque me hubiera
venido muy bien, no haberlo tenido que aprender yo después». Ahí surgió la
idea, un libro que llamó a otros. «A partir de aquél libro pensé en otros
libros que había leído, la literatura en mi vida, obviamente, está muy
presente, empecé un poco a ver el tema de lo que había sido mi vida a través de
la literatura, de hecho primero escogí las novelas y luego cree a Carolina, a
su familia, creé el instante del inicio de la historia, lo principal de todo
fueron las novelas». Aunque curiosamente más tarde me dice que la elección de
esos libros varió a causa de la protagonista de ‘Amapolas en octubre’. «Los
libros que yo había escogido para ella me los cambió, al principio estaban unos
que luego cambié porque veía que no me encajaban con el personaje a medida que
iba escribiendo». Afirma que «lo que me pasó, que para mí es lo más bonito que
me ha pasado con esta novela es que, después de ‘Mujercitas’, que era el libro
que yo tenía clarísimo, Carolina se alejó de mí, eso es lo bonito de la
literatura, el autor y el personaje tienen un parentesco y llega un momento en
el que se corta el cordón umbilical, y el personaje tiene vida propia, y esto
me pasó con Carolina, después de ‘Mujercitas’ ella salió por la puerta y yo me
limité a escribir lo que ella me contaba».
Carolina Smith
es la protagonista de esta novela que su hermano Guillermo tiene por valiente,
generosa, leal y a la que no le gustan las cosas fáciles. Pero prefiero
preguntarle a Laura Riñon.
«Carolina es
una mujer que lleva demasiado tiempo contenida viviendo hacia dentro que tiene
tantas emociones dentro de ella y tanta necesidad de dejar que salgan que en
algún momento le tenía que pasar esto. La circunstancia es el detonante para
que le suceda, porque ella es una mujer que siente que vive para agradar al
mundo, que todo el mundo sea feliz y ella es feliz así, pero yo a Carolina le
hubiera dado tres sopapos en más de cuatro ocasiones. Porque es como que no
reacciona, ¿sabes? Ese sentimiento tan intenso: sal, vive, rompe. Carolina es
una mujer que es como es por la infancia que tiene, vive en esa burbuja
literaria que su hermano ve como un divertimento, porque su hermano aunque
suene a tópico piensa que las cosas son blancas o negras, y disfrutar de la
vida, y Carolina es blanco, blanco roto, blanco marengo y todo le afecta. Vive
en esa burbuja con ese sentimiento de agradar de que la quieran y se confunde,
al final cree en una realidad que es irreal, crea una realidad paralela que es
irreal».
La realidad es
que Laura ha cumplido sus objetivos al escribir esta novela, al menos uno que
me dice mientras seguimos hablando de la novela tomando un café, que el libro
gustara. A mí, desde luego, me ha
gustado y me ha hecho trastear estos días entre los estantes de mi biblioteca.
«Una de mis ilusiones era que el libro se leyera, que el libro gustara, y sobre
todo que el lector tuviera curiosidad por los libros que menciono si no los ha
leído, sobre todo, o si lo ha leído que los leyese otra vez. Una chica hace
poco me dijo: “he vuelto a leer Mujercitas”, A mí eso me encanta».
Laura Riñón
Sirera nació en Zaragoza aunque con tres años se trasladó con su familia a
Alcalá de Henares. Es autora del blog ‘Palabra de Laura’ y ha publicado un
libro de relatos ‘Dueño de tu destino’ (Premio Éride 2014) y la novela ‘Todo lo
que fuimos’.
Gracias por un artículo tan bonito y un rato tan agradable, es un gusto compartir un café con alguien que tiene interés en leer lo que una escribe con tanta ilusión. Un abrazo fuerte Ginés.
ResponderEliminarSilbaré pronto ;)
Gracias a ti, Laura. Las palabras sirven en este caso para darte las gracias, para invitar a los lectores a que lean tu novela y para que visiten tu blog, un guiño al hilo de tu novela llamando a más novelas y lectores; desde Maleta de libros a Palabra de Laura. Un saludo.
EliminarMás que una entrevista la considero un relato de lo comentado tras una buena taza de café, de la que emanado este buen artículo. Felicidades.
ResponderEliminarGracias, eso si es un cumplido. Un saludo con afecto, amigo.
EliminarQué buena entrevista! Me ha gustado conocer a la autora. Y que el empujón para esta novela se lo diera Nemirosky me da una razón de peso para leerla. Apuntadita y subrayada me la llevo.
ResponderEliminarBesotes!!!
Me voy a quedar sin palabras, agradecidísimo por las tuyas, de verdad. Como suelo decir, si lo lees estaré encantado de conocer tu opinión. Un saludo, Margari.
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